La Corte de Apelaciones del Segundo Distrito de Nueva York levantó la suspensión cautelar que impedía el embargo de bienes argentinos para ejecutar la sentencia de Thomas Griesa en favor de los fondos buitre, en la misma jornada en que el juez convocó a las partes para discutir los próximos pasos, y un día después de que el Gobierno nacional anticipara la propuesta para pagar los bonos reestructurados, y ratificara su disposición a negociar con quienes rechazaron los canjes de 2005 y 2010.
En su conferencia de la víspera, el ministro de Economía, Axel Kicillof, había revelado que instruiría a los representantes legales argentinos en Estados Unidos a iniciar contactos con Griesa, a quien le advertirían que si la Argentina se viera obligada a acatar el fallo, “esto conduciría al país al default”. Después de renovar la vocación negociadora de la Argentina, el funcionario había advertido que los buitres son buitres "porque no negocian".
Reunión con los buitres la semana próxima
Tras el fallo de la Corte Suprema de Estados Unidos a favor de los fondos buitre, los representantes legales de la Argentina se reunieron esta tarde con el juez de primera instancia, Thomas Griesa, en Nueva York y acordaron un encuentro para la semana próxima con los holdouts para alcanzar una salida a la situación.
Para la reunión con los representantes de los fondos buitre, viajarán la semana próxima funcionarios nacionales.
Según la agencia especializada en el mercado financiero Bloomberg News, desde el fondo NML, el principal querellante contra la Argentina, dijeron: "Si quieren hablar de un acuerdo, ellos saben cómo encontrarnos".
Según el fallo de primera instancia firmado por Griesa y ratificado en segunda instancia por la Cámara de apelaciones de Nueva York y, en tercera, por la Corte Suprema, Argentina debería pagar a los fondos buitre que iniciaron las acciones legales unos 1300 millones de dólares el próximo 30 de junio cuando vence el plazo para pagar 900 millones de dólares a los acreedores que entraron en los canjes de deuda de 2005 y 2010.
Sin embargo, esa situación, explicó el ministro de Economía, Axel Kicillof, traería aparejado el pago de unos 15 mil millones de dólares extra a todos los holdouts lo que dejaría al país en una nueva quiebra o default.
Fuente: Página 12/Infonews