Un informe titulado El plato fumigado compiló los resultados obtenidos de los controles de detección de agrotóxicos en frutas, hortalizas, verduras, cereales y oleaginosas, realizados por el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA) entre 2020-2022 en Argentina.
Entre las conclusiones, señalaron que la población de Argentina "en cada bocado de comida, ingiere permanentemente cantidades relevantes de residuos de agrotóxicos".
El informe fue realizado por Glenda Magia y Fernando Cavalleiro sin financiación pública ni privada con lo cual, aclararon, "no tienen conflicto de intereses". Fue a través de un pedido de Acceso a la Información Pública Ambiental (SAIPA) y a través del cual concluyeron existe "presencia relevante de residuos de agrotóxicos en los alimentos que se consumen en Argentina y que no son informados a los consumidores y consumidoras".
Precisamente, cuestionaron en varios tramos al Senasa por el tipo de relevamiento selectivo de algunos productos, y remarcaron que "el Senasa no garantiza la inocuidad del consumo
de alimentos esenciales y mucho menos protege la salud pública".
Entre los objetivos de El plato fumigado están "advertir sobre la ausencia de inocuidad alimentaria que implica el consumo de alimentos con residuos de agrotóxicos en razón del riesgo significativo de daño a la salud humana que representa una exposición sinérgica y crónica a bajas dosis de sustancias que tienen entidad para actuar como agentes cancerígenos, alteradores hormonales e inhibidores de las colinesterasas, entre otros efectos".
Según el informe, el Senasa hizo 6.191 detecciones de agrotóxicos en frutas, hortalizas, verduras, cereales, oleaginosas y especias aromáticas (54 productos) que corresponden a los controles realizados por el organismo estatal entre 2020 y 2022 en 12 regiones de la Argentina a saber:
Con toda esa información, los autores compilaron un mapa de los 83 agrotóxicos hallados en los alimentos y también resumió los 10 alimentos con mayor presencia de agrotóxicos.
De los 83 agrotóxicos hallados, el 46 % son insecticidas, 41 % fungicidas, 10 % herbicidas y 3 % otros (coayuvantes), el 51 % fueron prohibidos en la Unión Europea, el 49 % son considerados agentes cancerígenos, el 76 % están catalogados como alteradores hormonales, el 19 % tiene entidad para actuar como inhibidores de las colinesterasas (una enzima crucial para la transmisión nerviosa en las uniones neuromusculares).
Sobre el glifosato apunta el informe: