Las entidades de presión del establishment nacional y trasnacional con intereses en la economía argentina operaron de forma directa contra la Ley Antidespidos. La declinación del Frente Renovador, de Sergio Massa, que le dio tiempo al gobierno de Mauricio Macri para seguir intentando voltear la norma de forma definitiva, se produjo después de que circulara un papel en contra del proyecto impulsado por los gremios.
El diario Tiempo Argentino reveló este domingo que la acción coactiva hacia los diputados fue firmada por la Asociación Empresaria Argentina (AEA), la Sociedad Rural, la Asociación Cristiana de Dirigentes de Empresa (ACDE), la Asociación de Bancos de la Argentina (ABA), el Instituto para el Desarrollo Empresarial (IDEA) y la AmCham (Cámara de Comercio de Estados Unidos en la Argentina). Los dueños locales y extranjeros de la Argentina se dirigieron por carta personalizada y con entrega directa a los 257 diputados del Congreso de la Nación, contaron los periodistas Gimena Fuertes y Martín Piqué.
Los empresarios escribieron un texto de corte macrista. Con apoyo sin dudas a la gestión de Macri y críticas a la movida articulada por los sindicalistas con los partidos de la oposición, que al final fue boicoteada por el massismo, a pesar de que bajo el ala del ex intendente de Tigre se cobijan varios dirigentes sindicales.
El comunicado revelado por Tiempo ponía el foco en la supuesta "inoportunidad" (sic) de sancionar una ley similar a la de 2002 "cuando el país ya comenzó a tener un conjunto de decisiones que favorecerán el camino del crecimiento económico". En el párrafo siguiente, la carta prescindía de toda distancia respecto del oficialismo. "Deben puntualizarse los avances logrados en estos meses en términos de institucionalidad y respeto por las reglas de juego, así como por las definiciones adoptadas por el gobierno nacional, tales como la eliminación del cepo, de la mayoría de las retenciones a las exportaciones, y de la exitosa conclusión del conflicto con los holdouts", elogiaba con un tono que dejaba entrever satisfacción y un apoyo entusiasta con el rumbo del país.
En el texto figuraba incluso una mención elogiosa a las políticas de trabajo joven de la administración macrista, como el proyecto "Mi primer empleo", que –según la letra del documento– "son compartidas por los empresarios y una parte significativa de la dirigencia". El programa "Mi primer empleo" debutó este jueves con un acuerdo con McDonalds (Arcos Dorados Argentina SA), cadena de comida rápida fundada en Estados Unidos y que aquí es socia de la filial de AmCham.