En Mendoza cambia el mando, pero sigue y se profundiza el vaciamiento de las reservas naturales con el mismo responsable al frente: el secretario de Ambiente Humberto Mingorance. En las últimas horas, guardaparques revelaron que en plena temporada de Aconcagua no hay controles ofixlaes a las empresas que embolsan miles de dólares por visitantes extranjeros. Además denunciaron que la reserva Llancanelo está cerrada, sin guardaparques ni móviles para su manejo.
"Llancanelo emblema de la defensa de los humedales, cerrada, sin vehículo ni personal Guardaparque. La Payunia en medio de un proceso de planificación y de postulación como Sitio de Patrimonio Mundial (el cual ya fracasó hace menos de una década, por motivos similares a los que hoy afectan a esta reserva natural), cierra la histórica seccional del Oeste de la Reserva por falta de personal guardaparque y vehículo", señalaron en un comunicado.
Sobre la situación en el Aconcagua -que cada año es visitado por miles de extranjeros- indicaron que las seccionales Pampa de Leñas, Casa de Piedra, Plaza de Mulas y Plaza Argentina están cerradas, sin Guardaparques y con pocos insumos.
"Nadie controlando ni fiscalizando las actividades u operaciones de las empresas prestadoras. Desde el colectivo de las y los Guardaparques de Mendoza nos manifestamos preocupados e indignados por la falta de atención de la Secretaría de Ambiente al resguardo del patrimonio natural del Parque Provincial Aconcagua. Hoy está todo a pedir de las empresas privadas que facturan miles de dólares", agregaron.
El vaciamiento o desmanejo de las reservas naturales no es una novedad en Mendoza sino que se ha ido profundizando en la gestión de Rodolfo Suarez. Mingorance viene en el cargo desde el primer gobierno de Cornejo.
En esa línea, el colectivo de Guardaparques de Mendoza repudió las "tristes decisiones de manejo de la Secretaría de Ambiente" e instaron a la autoridades a dotar de los recursos necesarios para una adecuada administación del patrimonio natural de la provincia.
