Después de una persistente batalla contra la burocracia y una permanente movilización, huerteros de Valle de Uco consiguieron, en mayo pasado, el terreno para construir la Casa de las Semillas. Y este sábado 2 de noviembre hará su primer "Encuentro e intercambio de semillas criollas y nativas".
Será en el predio donde será construida la casa, en calle Primitivo Sancho de la villa cabecera de San Carlos, de 9 a 18 y será abierto a escuelas y público en gerenal.
La idea es hacer circular no sólo las semillas criollas sino las bases de un modelo productivo que refuerza lazos sociales entre agricultores para oponer al hegemónico modelo del agronegocio que viene en el paquete Monsanto-Bayer-Syngenta.
Habrá charlas, talleres, venta de productos agroecológicos y un patio de comidas a precios populares.
El banco de semillas de estos huerteros -nucleados en Crece desde el Pie- creció con y sigue creciendo básicamente en el espíritu campesino de compartir la generosidad de la tierra.
“Hace unos meses definimos una cantidad de especies para guardar y hoy tenemos semillas de porotos, tomates con variedades de peritas de polinización abierta, tomates amarillos de distintas formas, albahacas morada y verde, más de 40 especies, variedades benenjenas, tres o cuatro tipo de maíces, zapallos, alcayotas, pimientos morrones, pimientos cuatro cascos, esto de la primavera verano. También vamos a guardar habas, arvejas, lechugas, acelgas”, detalló Damián Moreno, de Crece desde el Pie, entrevistado por Comecuco.
Sobre la multiplicación de este tipo de intercambio de semillas que va por fuera de las multinacionales del agronegocio señaló Moreno que “más que reeducar hay que reflotar el conocimiento que existe. A. a los productores grandes les interesa poco esto, la semilla es un costo más, no le interesa decir si la guardo o no. Después cuando tengan que pagar la semilla va a ser otra cosa. Pero los productores chicos hace tiempo que guardan semillas, asique siempre intercambiamos semillas con los compañeros, al menos en el ámbito en que nos movemos nosotros”.
El lobby de Bayer-Monsanto
Bayer-Monsanto presiona por una ley de semillas para, en teoría “mejorar la productividad de la soja”.
Días atrás, en una entrevista con La Voz, el CEO y presidente de Bayer para la región Cono Sur, Christophe Dumont, cuestionó que no se avance en una nueva Ley de Semillas.
“Hace 23 años que en Argentina se analiza una nueva ley de semillas, con una legislación que es de 1973. El marco actual no está adaptado al mundo moderno ni al avance de la biotecnología para lograr mayor productividad de manera más sustentable para el ambiente”, señaló Dumont.
Más de 300 organizaciones campesinas, de agricultura familiar, de soberanía alimentaria, sindicales y de derechos humanos rechazan la ley y denuncian que el proyecto está hecho a la medida de las corporaciones del agronegocio y persigue a los pequeños productores al monopolizar bienes de los que además depende la alimentación del mundo.
Subrayaron en un comunicado que, desde hace meses, las corporaciones del agronegocio están negociando con el Estado los lineamientos generales de un nuevo marco legal que busca otorgarles a las semilleras (Bayer-Monsanto, Syngenta-Chemchina, Basf, entre otras) la posibilidad de terminar con el “derecho de uso propio” de los agricultores, y así cobrar regalías cada vez que se utilice una semilla sujeta a derechos de obtentor (las empresas).