La cobertura de nieve en la mayoría de las cuencas de los principales ríos de Mendoza es menor a la mitad del promedio delos últimos 20 años. Así se desprende de los datos compilados por el Observatorio de la Nieve de Los Andes de Argentina y Chile, que compiló los datos satelitales desde el 2000 a ambos lados de la cordillera.
Se trata de una plataforma desarrollada por el Instituto Argentino de Nivología, Glaciología y Ciencias Ambientales (IANIGLA-CONICET) con el apoyo del Centro de Investigación del Clima y la Resiliencia (CR)² de Chile.
El porcentaje de cobertura para el ciclo enero-julio de 2021 versus el promedio del mismo período para los años 2000-2021 deja en rojo a todas las cuencas, aunque algunas están en situación más critica que otras.
Similar panorama arrojó días atrás un estudio del Departamento General de Irrigación: en siete de las nueve estaciones en las cuales este organismo releva la acumulación nívea, y la compara con el promedio de la media histórica y el máximo histórico, el resultado de julio fue funesto: no hay nieve. 0%.
Lo que ocurre con la nieve en la cordillera regula la variabilidad hídrica local y regional y es clave para los glaciares, que se forman con acumulación y compactación de nieve. Sin nieve no hay hielo en la cordillera. Y por lo tanto el caudal de los ríos bajará.
En las imágenes a continuación se aprecia el cambio en la superficie cubierta de nieve en cada cuenca y la línea temporal que permite apreciar en línea roja el promedio respecto de la situación actual, marcada en los gráficos por la línea azul.
El Malargüe, alimento de Llancanelo
La cuenca del río Malargüe es la que menor cantidad de nieve acumuló este año respecto al promedio de los últimos 20 años. Acumuló en lo que va de 2021 el 15% de su promedio en dos décadas.
El río se origina en el lago Malargüe sobre la cordillera de los Andes a una altura de 2.500 msnm, recorre el departamento homónimo y desemboca en la laguna de Llancanelo, siendo su principal afluente.
Llancanelo es uno de los principales reservorios faunísticos de Mendoza y es un humedal en riesgo desde que pusieron allí el foco los apetitos de las empresas petroleras.
En 2018, la ong Xumek, denunció que la administración de Alfredo Cornejo en la provincia y Sergio Marinelli en Irrigación habían dejado al humedal en “absoluta desprotección” para favorecer a la empresa petrolera El Trébol, donde tienen participación Daniel Vila y José Luis Manzano, que saca agua de los arroyos El Alamito y El Chacay, que alimentan a la laguna sureña, para hacer fracking.
El Diamante, afluente del Desaguadero
El Diamante tiene un 36% de cobertura nívea entre enero y julio respecto del promedio del mismo período para los años 2000-2021.
Nace de glaciares en el volcán Maipo, en la frontera andina argentina–chilena, y fluye hacia el este hasta vaciar en el río Desaguadero. Tiene una cuenca hidrográfica de 2750 km² en la región central de Mendoza.
El Diamante se alimenta del deshielo que entra al lago Diamante. Tiene un caudal de 33 m³/s, con máximos en primavera y en verano; entre octubre–marzo suma el 70 % del volumen anual de agua.
El curso superior del río va al sur y finaliza yendo al norte, y entra al profundo y angosto "Cañón de Agua del Toro", donde se endica para producir hidroelectricidad por el Embalse Agua del Toro, a 69° O, aguas abajo en el Embalse Los Reyunos. Juntos generan 500 MW.
Río Colorado, en su peor momento
Mendoza comparte la cuenca del Colorado con La Pampa, Neuquén, Río Negro y Buenos Aires. La cuenca tiene 38% de nieve respecto a su acumulación histórica de los últimos 20 años, según el observatorio binacional.
Mendoza puso en jaque la noción de cuenca hídrica al promover la construcción de Portezuelo del Viento, una enorme represa sobre el río Grande, en Malargüe, principal afluente del Colorado. Desde que se aceleraron los plazos las provincias que se verán afectadas río abajo exigen ala Nación que se realice un estudio de impacto ambiental que contemple los cambios en los parámetros ambientales de las últimas décadas, a lo cual Mendoza se resiste.
La Asamblea por el Agua es una de las instituciones que batalla para que el gobierno realice otras obras urgentes para la distribución del agua entre la población antes que "dilapidar" los fondos en un dique que, dadas las condiciones actuales de falta de nieve en la cuenca y agua en el Colorado, tardaría mucho más de lo previsto en llenarse.
El Atuel, disputado con La Pampa
La nieve en la cuenca del Atuel es de 42% respecto al promedio de los últimos 20 años. Nace en el lago homónimo y desemboca en el Desaguadero. En este recorrido drena una superficie aproximada de 39 404 km². a lo largo de unos 790 kilómetros.
Existe una disputa interprovincial entre La Pampa y Mendoza por el aprovechamiento del Atuel, con fallos de la Corte Suprema y de la ONU que favorecen a los pampeanos.
La situación se agrava cuando se registran años de menor caudal, debido a la poca precipitación nívea y la falta de lluvias en verano, situaciones de sequía que empeoran los problemas entre las dos provincias, al aumentar los requerimientos del caudal y la escasez del mismo.
El Tunuyán y el Mendoza, sobre el 50%
La cuenca del Tunuyán y del Mendoza son las únicas que, al menos están a poco más de la mitad de su promedio histórico.
En el caso del Tunuyán está a 56% de su promedio de los últimos 20 años, según el observatorio argentino-chileno.
El Tunuyán nace en el volcán Tupungato, en la Cordillera de los Andes, y fluye inicialmente hacia el noreste, pasando por la ciudad de Tunuyán. Es endicado en El Carrizal, después gira pasando cerca de Rivadavia, Santa Rosa y La Paz. Finalmente se abre en el Tunuyán Nuevo (al norte) y Tunuyán Viejo (al sur), y desemboca en el río Desaguadero.
La nieve sobre la cuenca del río Mendoza, en tanto, está a 60% de su promedio de los últimos 20 años.
El río Mendoza está formado en su totalidad por aguas de deshielo, que, a su vez, se forma por la acumulación nívea en las altas cumbres.
Nace en Punta de Vacas, donde confluyen los ríos Tupungato y Cuevas e, inmediatamente aguas abajo, por margen izquierda, el río Vacas; desde ese lugar recibe aportes de los Ríos Colorado y Blanco (por margen derecha) y los Arroyos Picheuta y Uspallata por margen izquierda.