Este viernes el tribunal formado por Néstor Murcia, Alejandro Celeste y Esteban Vázquez Soaje dará a conocer la sentencia del tercer juicio por la violación grupal y el femicidio de Paula Toledo, ocurrido hace 17 años en San Rafael.
La familia de la joven espera que el único acusado, Marcos Graín, "salga esposado rumbo al penal", mientras que para la defensa "no hay ninguna prueba" que permita condenar no sólo a Graín, sino a ningún autor por la desastrosa instrucción de a causa, que incluyó el lavado del cuerpo antes de tomar muestras hasta la contaminación total de la escena del crimen y omisiones en la investigación.
En ese punto, la defensa alertó sobre la impunidad de Jorge Sánchez, quien fue sobreseído pese a haber abundante evidencia en su contra, como la declaración de su propia madrastra, quien declaró haberlo visto llegar ensangrentado la madrugada del femicidio de Paula.
Esta semana las partes dieron sus alegatos, durante los cuales la Fiscalía pidió 25 años de prisión para Graín, la querella prisión perpetua y la defensa la absolución para Graín. En las audiencias fue palpable la presencia de familiares y amigos de Paula en las afueras del tribunal.
La Fiscalía, a cargo de Pablo Peñasco, puso el foco en una condena ejemplificadora y buscó salvaguardar a la policía de San Rafael de las denuncias por aprietes y amenazas contra testigos.
La querella -asumida por Guillermo Rubio y Celeste Marchetti- admitió los errores en la etapa de instrucción de la causa -los cuales determinaron las consecutivas absoluciones por falta de pruebas-pero apuntó: "Esto no significa que el plexo probatorio que hemos analizado no sea más que suficiente para condenar a Marcos Graín”.
Para la Fiscalía, Graín fue el entregador
Peñasco hizo foco en la relación de Graín y de Toledo para enfatizar el rol del único acusado como entregador de la víctima. Sostuvo que Paula confiaba en Graín y depositaba en él y en su familia una confianza que la dejaron expuesta a condiciones de vulnerabilidad.
“Paula vivía en ese barrio desde hace muchos años. Había fallecido su padre. Había fallecido la esposa de su hermano. Su familia tenía problemas económicos y vivían en una condición de hacinamiento. Tenía baja autoestima por un problema en el rostro. Era confiada y dócil. En ese contexto, le daba relevancia a su relación de pareja. Concurría varias horas a la casa de Graín, ayudaba a sus sobrinas a hacer las tareas. Había constituído con Graín una relación afectiva. Su estado anímico fue aprovechado por el agresor”, se explayó.
“Con Graín comienza la ejecución del hecho. Graín traiciona y entrega a Paula, la dejó en poder y en manos de los autores. Fue una contribución necesaria para el abuso sexual”, apuntó también Peñasco.
La querella apuntó a la planificación del crimen
La querella hizo foco en el accionar impune de la pandilla que lideraba Graín junto a los hermanos Echegaray y los Gauna, que ejercían el poder territorial en el barrio El Sosneado y sus alrededores.
Para la querella Graín es coautor del crimen y no sólo el entregador. y le sumó a la acusación agravantes como el ensañamiento y la participación de dos o más personas en el crimen.
En ese sentido apuntó a la retracción del Estado y a la caracterización de los femicidios como crímenes políticos. “Siguen ejerciendo el terror, hemos visto en esta causa testigos aterrorizados”, remarcó.
“Graín tenía que afianzar su señorío en ese grupo. Y eso fue la planificación de la violación de Paula. Viene a afianzar su dominio territorial en ese círculo”, señaló el abogado querellante.
Para la defensa, el Estado es responsable
Daniela García, a cargo de la defensa, refutó las pericias psicológicas y de violencia expresivas incorporadas en el tercer juicio, calificando los informes de “vagos e imprecisos”. También negó la relación pandillezca de Graín con los Echegaray (Víctor y Alejandro), Iván Gauna y Eduardo Muñoz, los apellidos que sobrevolaron todo el juicio acerca de la noche en que ultimaron a Paula.
La defensora apuntó al rolde la policía borrando pruebas, contaminando la escena del crimen y apretando testigos: “Era la época de Guardati y Bordón. Esa era la policía”
“La policía se dedicó a obstruir, no investigó, se centró en los amigos de Paula. Fue una investigación baja, de pacotilla. Se centraron en destruir pruebas que había y a descartar investigación fundamental”, remarcó.
La familia de Paula espera una condena a Graín
La familia de Paula Toledo espera que el tribunal condene a Marcos Graín con la máxima pena y pidió en la víspera de la sentencia el acompañamiento en las afueras del Tribunal.
La familia considera que los jueces tendrán que decidir "no solo si el femicida Marcos Graín es condenado, sino que decidirá si este tribunal es o no es un cómplice más del entramado oscuro que ha permitido que pasen casi dos décadas si un solo preso, al mismo tiempo que se viciaba de irregularidades la causa".
"Deben saber, los jueces, que estaremos acompañando el juicio, esperando que por esas puertas Graín salga esposado rumbo al penal", señalaron.
