Camila Speziale y Hernán Pérez son parte del grupo de activistas capturados en una base petrolera en el mar de Pechora. Los juzgan por piratería, aunque la ONG y hasta Putin niegan ese delito.
La Justicia rusa dispuso la prisión preventiva por dos meses de la mayoría de los activistas de Greenpeace detenidos el jueves en el Ártico, entre ellos los argentinos Camila Speziale y Hernán Pérez.
Los ambientalistas viajaban en el rompehielos "Arctic Sunrise" y desde allí intentaron escalar la plataforma petrolera de Gazprom, en el mar de Pechora, para alertar sobre el peligro que la actividad implica en esa zona, rodeada de tres reservas naturales.
Al persistir en el intento la Guardia Costera los detuvo, remolcó el buque hasta la bahía de Murmansk y los activistas quedaron a disposición de la justicia, que comenzó con las audiencias y fue disponiendo dos meses de prisión preventiva a medida que declaraban, según dijeron por "peligro de fuga".
La medida recayó también sobre Speziale, de 21 años, que realizaba su primera misión de esa envergadura, y Pérez Orsi, de 40 y miembro de Greenpeace Internacional, confirmó a Télam una fuente de la ONG.
Además fueron detenidos el capitán del "Arctic Sunrise", el estadounidense Peter Wilcox; los rusos Roman Dolgov, coordinador del programa del Ártico de Greenpeace, y Denis Sinyakov, conocido fotógrafo de prensa y dos activistas, junto con tres británicos, dos canadienses, dos neocelandeses, un polaco, un suizo, un francés, una danesa, un turco, un italiano y un australiano.
Dolgov explicó durante la audiencia que es experto en contaminación marina y que no participó en la acción de protesta, pero igual deberá pasar dos meses tras la rejas, reportó EFE.
Lo mismo le ocurrió a Sinyakov, contratado para documentar el viaje del "Arctic Sunrise". "El proceso criminal por el que soy culpado se llama periodismo. Lo voy a seguir haciendo", dijo el fotógrafo según citó la agencia DPA.
En otros siete casos, entre ellos el de la brasileña Ana Paula Maciel, se decidió que seguirán tres días más bajo custodia, hasta la próxima audiencia.
La justicia los investiga por piratería organizada, por lo que podrían ser condenados con hasta 15 años de prisión.
Greenpeace Argentina repudió hoy la decisión del tribunal por ordenar la prisión preventiva para los tripulantes.
"Ninguno de los miembros de la organización cometió el delito de piratería", afirmó Martín Prieto, director ejecutivo local de la ONG, y agregó: "Nuestra acción fue en una plataforma de petróleo, Greenpeace nunca abordó un barco, ni tuvo el propósito de robo, mucho menos existió violencia por parte de la organización".
Según el artículo 227 del Código Penal Ruso, para acusar de piratería a quien ataque un barco debe mediar el propósito de robo de bienes o mercadería a bordo, hacerlo con violencia o amenazar con emplearla. Y ninguno de esos supuestos se dio en este caso. "Greenpeace tiene más de 40 años de historia en acciones pacíficas", señaló.
Prieto consideró "contradictorio que a 24 horas de la declaración pública del presidente Vladimir Putin, que afirmó que no existió delito de piratería, una corte rusa los comience a investigar por ello".
"Resulta evidente que se trata de un intento de silenciar la protesta no violenta e intimidarnos. Toda la organización continuará firme exigiendo su liberación y la protección del Ártico", afirmó el dirigente.
La filial rusa de la ONG dijo que las autoridades han trasladado a más magistrados a Múrmansk ante la falta de jueces para atender ese proceso.
Los llamados internacionales para que Rusia ponga en libertad a los activistas se incrementaban el jueves, mientras Gazprom reiteraba que la acción de la ONG puso en peligro la salud e incluso la vida de los trabajadores de la plataforma "Prirazlómnaya", que espera poner en producción en 2014.
Los detenidos fueron llevados esposados a la sala judicial, donde, como es usual en Rusia, siguieron el proceso en una jaula. La televisión estatal transmitió una parte en vivo desde el tribunal.
Todavía hay 13 activistas que no recibieron ninguna comunicación. La portavoz de Greenpeace en Moscú, Tatyana Vasilyeva, especuló con que la audiencia continuará hasta entrada la noche, porque sin una decisión del tribunal los detenidos deberán ser liberados.
Greenpeace convocó para el viernes a las 19 a una concentración pacífica frente a la embajada de Rusia en la ciudad de Buenos Aires (Rodríguez Peña 1741), para mostrar apoyo y reclamar por la liberación de los activistas.
Fuente: Télam