“El diálogo marcha a buen paso y se ha llegado a puntos de coincidencia, aunque persisten algunas diferencias”, señalaron ambas partes en el último comunicado, emitido el 24 de enero tras la tercera ronda de encuentros.
Los equipos negociadores de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP) y del Gobierno de Juan Manuel Santos tienen previsto reiniciar este jueves el cuarto ciclo de diálogos para la paz, en la ciudad de La Habana, Cuba, tras un receso de una semana.
Las conversaciones se reanudarán en el Palacio de Convenciones, con Cuba y Noruega como garantes de un proceso que busca poner fin a un conflicto armado que vive las nación suramericana desde hace más de 50 años.
El pasado 24 de enero finalizó la tercera ronda de negociaciones, en la que ambas partes dieron a conocer un comunicado conjunto en el cual consideraron que “el diálogo marcha a buen paso y se ha llegado a puntos de coincidencia, aunque persisten algunas diferencias”.
Según el texto, las aproximaciones se refieren a la erradicación de la pobreza rural y al logro de una transformación de la realidad del campo, a través de la implementación de programas integrales encaminados a democratizar el acceso a la tierra.
Hasta el momento, la mesa de conversaciones, iniciada el 19 de noviembre pasado, se ha centrado en el tema del desarrollo rural, el primero de una agenda de seis puntos acordada por las partes.
Mientras las FARC-EP exigen una reforma rural y agraria integral, socioambiental, democrática y participativa que mejore las condiciones de vida en el campo, el Gobierno defiende una política agraria “de avanzada, audaz y nueva, respetando el derecho privado, respetando la propiedad y respetando los derechos adquiridos de buena fe".
Además del tema de la tierra, los otros puntos que las partes deberán abordar son la participación política, el fin del conflicto armado, la solución al problema de las drogas ilícitas, los derechos de las víctimas y los mecanismos de verificación y refrendación de lo pactado en la mesa.
Nuevas retenciones
El inicio de este cuarto ciclo de conversaciones se de luego de conocerse la retención de dos uniformados por parte de las FARC-EP, una acción que fue reivindicada por el grupo rebelde.
El jefe del equipo negociador del Gobierno, Humberto de La Calle, repudió este hecho y expresó la solidaridad de la delegación con la Policía Nacional y las familias de los retenidos.
“Se equivocan radicalmente (las FARC-EP) si piensan que con acciones de este tipo van a obligar al Gobierno a un cese del fuego bilateral”, enfatizó De la Calle.
En tanto, el congresista Iván Cepeda, del Polo Democrático Alternativo, consideró que la retención de los policías representa un inconveniente para el proceso de diálogo.
“Esos sectores giran en torno a la personalidad política de (el expresidente) Álvaro Uribe y a todo ese entramado paramilitar que se ha expandido en varias regiones del país”, aseveró.
Por otro lado, organizaciones sociales y de víctimas pidieron al Gobierno del presidente Juan Manuel Santos el cese bilateral del fuego, para que el proceso de paz no sea afectado por actos propios de la guerra.
Fuente: Telesur