Mientras AMPROS, el gremio de los profesionales médicos, discute la última propuesta de Rodolfo Suarez, SITEA denunció que la oferta es "una nueva estafa a los trabajadores de la salud" y llamó a resistirla con más medidas de fuerza.
Raquel Blas, principal referenta de SITEA -este gremio fue excluido por el gobierno de la paritaria, al igual que los autoconvocados, SIPES y otros sectores como los residentes y precarizados- señaló que la nueva oferta "en números concretos, sumando lo que ya se ha cobrado y agregando 3 puntos más respecto del último rechazo se llega la 45 en diciembre pero en cuotas no acumulativas".
Aclaró Blas que cada cuota se calcula sobre el salario de diciembre de 2020, año en el que no hubo un solo aumento, es decir el sueldo del 2019. "Esto hace que el porcentaje real esté muy por debajo del 45 anunciado", recalcó la sindicalista.
Lo que propuso el oficialismo, además, es eliminar los bonos, que no se pasan al básico. "Blanquear montos en negro en un salario, NUNCA SIGNIFICÓ ELIMINARLOS. El blanqueo procede cuando el monto en negro se pasa al básico respetando las escalas porcentuales. Si esto no sucede o sólo se transforman en sumas fijas remunerativas -despejó Blas- como el mísero acuerdo firmado por ATE. El trabajad@r pierde salario en el bolsillo".
Otros puntos por los que, según Blas, se debe rechazar la oferta oficial:
• No se resuelve de fondo el pase de l@s licenciad@s en enfermería al 27 como marca la ley vigente.
•No hay resolución inmediata a ninguno de los reclamos planteados por la asamblea de residentes, "quienes se ven claramente perjudicados y perjudicadas al tener sus sueldos equiparados con las clases iniciales del 27 pero con un nivel extenuante de sobrecarga horaria y laboral".
•Nuevamente el aumento a prestadores , contratados y otros modos precarizantes de trabajo queda en manos del Ejecutivo.