El gobernador Francisco Pérez le bajó el tono a la pelea con la presidenta Cristina Fernández por el petróleo, en el marco de la cual la Casa Rosada congeló el refinanciamiento de la deuda pública de Mendoza y otras tres provincias opositoras al modelo hidrocarburífero delineado por el CEO de YPF, Miguel Galuccio, en un proyecto de ley.
El mendocino negó que haya una pelea y deslizó que se está negociando con el presidente de la petrolera nacionalizada una suba del porcentaje correspondiente a regalías para compensar los perjuicios a los ingresos provinciales que supone el texto que impulsa el Gobierno nacional para regir la explotación de esa actividad.
Pérez participó este lunes en la tarde por teleconferencia de un acto encabezado por la Presidenta desde la Casa Rosada para proceder a una serie de inauguraciones en distintos puntos del país. Fue el primer contacto del mandatario con Cristina Fernández desde que fuera dejado de lado la semana pasada en un acto para refrendar la refinanciación de deudas provinciales, al que asistieron 13 gobernadores.
A pesar de ese incidente en la relación, con consecuencias inéditas desde que Pérez gobierna en Mendoza, ni el mandatario ni el kirchhnerismo están pensando en romper relaciones ahora. Los golpes cruzados se explican en el marco de una negociación entre el gobierno central y los cuatro de las provincias que tienen compromisos con empresarios nacionales que temen ser desplazados del mapa petrolero por el plan de Galuccio.
El gobernador estuvo este lunes en la tarde en la inauguración del Instituto de Histología y Embriología de Mendoza (IHEM), en el nuevo edificio del Instituto de Investigación en Ciencias Biomédicas, al sur de la facultad de Ciencias Médicas, en la Ciudad Universitaria de la UNCuyo, en el Parque General San Martín. En el cruce por satélite con Cristina Fernández no hubo señales de la pelea por el petróleo.
