Macri dio de baja con un decreto a los embajadores que no son de carrera diplomática, sino que consiguieron ese puesto por afinidades políticas con el presidente. Entre ellos están José Octavio Bordón y Patricia Giménez, quienes deben regresar desde Chile y Costa Rica, respectivamente, al país el 9 de diciembre.
La medida fue dispuesta por el decreto 784 firmado por Macri y el canciller Jorge Faurie, publicado este viernes en el Boletín Oficial.
Además de Giménez y Bordón -que fue noticia en los últimos días por ser la Embajada Argentina blanco de los manifestantes chilenos-, deben volver los embajadores en Bolivia, Miguel Alvarez García; en Colombia, Marcelo Stubri y en China, Diego Guelar.
También el decreto alcanza al embajador ante la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), Rodolfo Terragno; ante España, Ramón Puerta; en Portugal, Oscar Moscariello; en los Estados Unidos, Fernando Oris de Roa, y en Uruguay, Mario Barletta.
La medida abarca asimismo al embajador ante el Mercosur y la Aladi, Mauricio Devoto; en Ecuador, Darío Giustozzi; en Paraguay, Héctor Lostri; en Israel, Mariano Caucino; en Costa Rica, Patricia Giménez; en México, Ezequiel Sabor, y en Perú, Jorge Yoma.
El decreto establece que «los funcionarios deberán encontrarse en la República el día 9 de diciembre de 2019», es decir un día antes del traspaso presidencial.