Rusia indicó hoy que desplegó uno de sus aviones interceptores sobre el mar Báltico para evitar que dos bombarderos de Estados Unidos se aproximen a su frontera.
"Después de la retirada de los aviones de guerra extranjeros de la frontera con Rusia, el caza ruso, un Su-27, regresó a su aeródromo de origen", sin incidentes, indicó en Telegram el Ministerio de Defensa ruso.
Según ese informe, los dos aparatos interceptados eran bombarderos estratégicos B-1B de la Fuerza Aérea de Estados Unidos, que "se aproximaban de la frontera de Rusia", citó la agencia de noticias AFP.
"La frontera rusa no fue violada", precisó.
Los incidentes entre aviones rusos y de países miembros de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) se multiplicaron en los últimos años, incluso antes del inicio de la invasión militar rusa en Ucrania el 24 de febrero de 2022.
La semana pasada, un incidente similar se produjo cuando un caza ruso interceptó un avión militar francés y otro alemán sobre el Báltico.
A inicios de mayo, un avión de la guardia fronteriza polaca que operaba en el mar Negro como parte de la Agencia Europea de Fronteras y Costas (Frontex) fue puesto en situación de peligro por la aproximación de un caza ruso, según Varsovia.
Un mes antes, la aeronáutica rusa aseguró que interceptó un dron estadounidense Reaper MQ-9 sobre el mar Negro, que después cayó en sus aguas.
El incidente provocó una breve escalada de tensiones entre Washington y Moscú.