En pocos días la UNCuyo fue noticia por dos actos de censura cometidos con distinta intensidad y violencia: el primero fue el silenciamiento de los investigadores de esa casa de altos estudios en los medios de la propia universidad y el segundo el ataque cometido contra una muestra que, en el marco del 8M, se montó en el Rectorado.
En el medio, la UNCuyo prestó sus instalaciones para una charla contra los mapuche, lo que generó el amplio repudio de diversas organizaciones sociales, humanitarias, originarias, ¿de Derechos Humanos, estudiantiles, entre otras. La charla fue encabezada por Alfredo Cornejo, Miguel Ángel Pichetto y la historiadora Andrea Greco de Álvarez. Esta última es una de las que pidió dar de baja a la muestra de arte en el Rectorado.
Sin embargo la rectora, Esther Sánchez, sólo se refirió a esta última cuestión, que empañó por completo el tema de los científicos censurados por la propia UNCuyo. En una conferencia de prensa realizada este martes ponderó a la UNCuyo como “ámbito libre, en donde todas las ideas pueden y deben ser expresadas con respeto y tolerancia”, y como institución pública, laica, gratuita “donde se exponen todas las ideas”. La censura a los propios investigadores de la UNCuyo quedó fuera del radar de discusión.
Los censurados por los medios de la UNCuyo fueron científicos que reconocieron la existencia de los pueblos mapuche en la zona sur de Mendoza. El silenciamiento fue hecho público por Diego Escolar, investigador del CONICET y profesor en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, en sus redes y luego en una entrevista en la radio de las Madres de Plaza de Mayo.
Lo ocurrido mereció el repudio de los trabajadores y trabajadoras de prensa de la UNCuyo que, en asamblea, decidieron publicar un comunicado para despegar su labor diaria de las maniobras de censura ejercida sobre Escolar.
Sobre la muestra atacada
dos días después de que la asamblea de trabajadores repudiara la censura en ka UNCuyo comenzó a instalarse otra "polémica" por la muestra de arte "8M Manifiestos Visuales", que reunía obras que, en contexto del Día de la Mujer, criticaba al patriarcado y las cargas sociales que oprimen a las mujeres.
Todo fue escalando y el mismo Arzobispado cuestionó las obras. Señalo que la muestra ejecuta "una violencia simbólica sobre signos religiosos cristianos, no solamente católicos" y hiere "convicciones religiosas".
El lunes por la noche, fanáticos católicos irrumpieron en el rectorado y destrozaron varias de las obras allí expuestas. El Arzobispado trató luego de despegarse de este accionar.
En ese contexto, la rectora Sánchez brindó una conferencia donde sólo se destacó el ataque a la muestra, pero la censura ejercida desde la misma UNCuyo fue silenciada.
Sánchez explicó que se hizo la denuncia por los destrozos a la Justicia Federal y dijo que se hará una investigación sumaria para determinar si hay responsabilidad de integrantes de la comunidad universitaria en el hecho delictivo.
¿Se pronunciará el Consejo sobre la censura?
Este miércoles, anticipó Sánchez, se abordará el tema del ataque a la muestra de arte en el Consejo Superior. Este organismo, precisamente, es al que le pidieron explicaciones los propios investigadores tras la censura contra Escolar.
La censura fue ejecutada en coincidencia con la campaña contra los mapuche encarada por Alfredo Cornejo, a la cual se sumó Rodolfo Suarez, no sólo en los medios masivos sino en el sistema de medios de la universidad, dominada por el cornejismo.
"El hecho de que se produzcan estos actos de censura en un medio propio de la Universidad reviste gravedad institucional y por eso solicitamos al Consejo Directivo que se expida al respecto y exija la restitución de la nota completa tal como fuera publicada el 18 de febrero. Asimismo, consideramos necesario solicitar un informe al Consejo Superior", señalaron los investigadores.