Senadores dictaminaron este martes a favor de un convenio de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) para eliminar la violencia y el acoso laboral, en un plenario en el que se registraron nuevamente discusiones entre legisladores del oficialismo y de la oposición por la metodología de trabajo en el marco de la pandemia.
Una parte de la bancada de Cambiemos resolvió desconectarse de una videoconferencia, en desacuerdo con expresiones del jefe del grupo del Frente de Todos, José Mayans, sobre la inclusión o no de temas no vinculados a la pandemia de coronavirus en el temario de futuras sesiones del Senado.
"Nosotros no tenemos que autolimitarnos y lo que hagamos va a tener plena vigencia", declaró Mayans en el final de un plenario de las comisiones de Relaciones Exteriores y de Trabajo, en el que se debatía un convenio de la OIT para la eliminación de la violencia y el acoso laboral en Argentina.
La oposición se expresó a favor de la propuesta de convalidación del convenio internacional pero consideró que el tema debía ser incluido cuando se retomen las sesiones presenciales y no en las audiencias remotas, cuyo temario estaba acotado a cuestiones relacionadas a mitigar los efectos del aislamiento social, preventivo y obligatorio.
En el inicio del plenario, que condujo el senador del FdT Jorge Taiana, la ministra de las Mujeres, Géneros y Diversidad, Elizabeth Gómez Alcorta, ponderó los alcances del convenio, específicamente para las políticas para erradicar la discriminación de las mujeres en ámbitos laborales.
"Es el primer tratado internacional que aborda de una manera específica y exhaustiva la violencia y el acoso en el ámbito laboral y desarrolla el alcance de las obligaciones del Estado y se trata de un aporte insoslayable para el desarrollo de políticas públicas", expresó Gómez Alcorta.
El presidente de la comisión de Trabajo, Daniel Lovera, calificó al convenio como "una herramienta federal que permite avanzar en políticas para llegar a cada rincón donde haya una trabajadora y hacer que conozca sus derechos y que tenga la libertad de reclamar por ellos".
Para la presidenta de la Banca de la Mujer, Norma Durango, la nueva normativa posibilitará "marcar un nuevo horizonte en las políticas públicas" para "cambiar la cultura y los comportamientos que hemos tolerado hasta ahora".
Violencia y acoso como violación a los DD.HH.
El convenio, votado y sancionado en Ginebra en 2019, considera a la violencia y el acoso en el mundo del trabajo como una “violación o abuso de los derechos humanos” incompatible con la igualdad y el concepto de trabajo decente, enmarcando la situación dentro de los derechos fundamentales.
Los senadores de Cambiemos Guadalupe Tagliaferri y Silvia Giacoppo apoyaron la iniciativa y aclararon que se trata de un entendimiento que fue trabajado "por varios gobiernos" y que no se alcanzó "como por arte de magia".
Mayans, a su turno, declaró que "el proyecto no es de nadie", afirmó que Argentina "será uno de los primeros países en ratificar el acuerdo" y consideró que su bloque considera que "hay que darle tratamiento urgente" porque "no se sabe cuánto va a durar esta emergencia".
"Al principio nos cuestionaban que el Parlamento no funciona y ahora el problema parece ser los temas que tenemos que tratar, y eso está decidido por la mayoría porque esto funciona con mayorías y minorías", subrayó.
Después de que el senador aliado de Cambiemos Juan Carlos Romero adelantara su apoyo a la iniciativa pero advirtiera que no debía votarse en el recinto en el marco de las sesiones remotas, Mayans remarcó que el cuerpo "puede tratar los temas que considera convenientes sin limitaciones teniendo en cuenta cómo se está desarrollando la pandemia".
La aclaración de Mayans generó una nueva discusión entre oficialistas y opositores que terminó cuando varios de los legisladores de Cambiemos, como Romero, Martín Lousteau y Esteban Bullrich, se desonectaran de la reunión, molestos con las expresiones del senador del FdT sobre las limitaciones del temario.
"No coincidimos con la interpretación de Mayans sobre la falta de límites", sostuvo Lousteau antes de retirarse de la audiencia virtual en medio de recriminaciones al presidente del plenario, Jorge Taiana, porque no le permitió el uso de la palabra.
En el cierre de la videoconferencia, Taiana lamentó la reacción de la oposición y que el debate sobre el convenio se haya "politizado excesivamente" y subrayó que "es faltar a la verdad decir que no se han escuchado a todas las voces".