Sólo para comer -lo básico, sin lujos- una familia de dos adultos y dos niños necesita en Mendoza $40.000 pesos, mientras que debe reunir al menos $100.000 para no caer bajo la línea de pobreza, según los valores de junio publicados por la Dirección de Estadísticas e Investigaciones Económicas (DEIE). Esto sin contar el alquiler, que no se computa en el cálculo.
Los aumentos constantes en el costo de vida en Mendoza la ubican con la inflación más alta del país si se compara el promedio por regiones que mide el INDEC.
La inflación de Mendoza supera a la nacional empujada por la ropa y la atención de la salud
Estos datos deben leerse linkeados con el bajo nivel salarial tanto en el sector público como en el privado de Mendoza, donde crece mes a mes la cantidad de personas que deben buscar un segundo o tercer empleo para poder subsistir. Es decir, un ejército de trabajadores pobres que de 122 mil a principios de 2021 pasó a 137 mil personas según la última medición.
En junio, según la DEIE y con una foto que ya quedó vieja a la luz de nuevos aumentos como el boleto de micro, una familia de 4 necesitó reunir 99.176 pesos para no ser considerada pobre.
Muchos de los trabajadores estatales están por debajo de esa cifra, por ejemplo los docentes que recién se inician, e incluso muchos de ellos con varios años de ejercicio y pago por zona.