Sin contar el alquiler, una familia de dos adultos y dos niños necesita reunir en Mendoza 95.405 pesos para no ser pobre, según la Dirección de Estadísticas e Investigaciones Económicas (DEIE). El salto mensual desde que empezó el año implica un encarecimiento de unos cinco mil pesos promedio mes a mes.
Así, mientras en enero se precisaban poco más de 74 mil pesos, al mes siguiente se acercaba a 79 mil pesos, y en marzo ya ascendía a 84 mil. Así en constante evolución, como muestran los datos de la DEIE. El aumento en los primeros cinco meses del año fue de 21,7% en ese valor.
Este dato debe leerse linkeado a la creciente cantidad de mendocinos que aún teniendo trabajo buscan otro para llegar a fin de mes. También se relaciona con la profundización de la pobreza, una tendencia marcada desde la administración de Alfredo Cornejo.
Sólo para comer y no ser considerado indigente el grupo familiar debe tener como mínimo 38.469 pesos, lo cual explica, junto con el deterioro de los salarios en esta provincia, el crecimiento constante de la pobreza.
La inflación en alimentos en Mendoza fue de 4,9% en mayo, lleva 32,8% en lo que va del año e interanual es de 65,2%, por encima del promedio de inflación de todos los ítems, que en un año fue de 63% según la medición respecto a mayo de 2021.
A nivel general, la inflación en Mendoza fue en mayo de 5,4%, con una acumulación de 30,4% desde enero y 63% interanual.
Sólo la región del Noroeste supera en promedio a lo que marca Mendoza, con 5,1% en inflación en alimentos. La de Mendoza supera al promedio que marca con sus vecinas cuyanas, que ascendió a 4% según el INDEC. En abril, los números de Mendoza fueron los más altos del país.
La inflación en alimentos en Mendoza acumuló 32,8% en los primeros cinco meses del año
