Mientras el gremio de maestros denuncia que no hay condiciones en las escuelas de Mendoza para volver a una "presencialidad segura" y la propia ministra de Salud admite que los alumnos "se van a enfermar de coronavirus", el gobernador Rodolfo Suarez instó a la responsabilidad "de todos" para que los estudiantes puedan volver a las aulas.
Ese fue el mensaje de un spot difundido este lunes a través de las redes sociales: "Para que cada estudiante pueda estar en su escuela, sólo queremos que te cuides. Seguimos confiando en vos".
El compromiso de los mendocinos ha permitido que la Provincia siga en pleno funcionamiento. Sigamos defendiendo juntos lo que hemos logrado.#MendozaAbierta #SigamosCuidándonos pic.twitter.com/AW0gYnAVgF
— Rodolfo Suarez (@rodysuarez) February 15, 2021
"No hay condiciones para una presencialidad segura. Escuelas donde no hay agua, donde no hay buena ventilación, falta de espacios, baños en pésimas condiciones, falta de suministro de agua, cero presupuesto para los insumos necesarios, ausencia de conectividad en los establecimientos y un largo etcétera", remarcó el SUTE en contrapartida al impulso oficial a la presencialidad.
La semana pasada, José Thomas, titular de la DGE, difundió fotos de grupos de alumnos en algunas escuelas y aseguró que los problemas edilicios detectados se van a solucionar antes del inicio de clases.
Como política oficial, adelantó Thomas en una entrevista radial, se va a delegar en los directores el control de la situación. “Vamos a hacer hincapié en el empoderamiento de los directores, con todo el apoyo de la DGE. Cada escuela tiene un director que dirige su escuela”, fueron sus palabras.
"Han arrojado toda la responsabilidad a las escuelas, como siempre hacen. El resultado será más sobrecarga trabajo, doble modalidad y todo esto a cambio de un salario miserable que cada vez más queda por debajo de la línea de pobreza", reprochó el gremio, que esta semana mantendrá asambleas y plenarios virtuales.
Lo cierto es que Mendoza se encamina a un inicio de clases presenciales sin protocolos actualizados -Thomas dijo que son los mismos de julio del 2020- ni docentes vacunados, sin “burbujas”, sólo con el barbijo y la exigencia de que las maestras controlen el distanciamiento social.