Sin una mágica ingeniería electoral, el kirchnerismo perderá senadores en los comicios de este año

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Miguel Ángel Pichetto, senador por Río Negro que preside el bloque del Frente para la Victoria, es uno de los que debe renovar la confianza en las urnas para seguir en la Cámara Alta.
Miguel Ángel Pichetto, senador por Río Negro que preside el bloque del Frente para la Victoria, es uno de los que debe renovar la confianza en las urnas para seguir en la Cámara Alta.

Por Javier Polvani
@javierpolvani

Entre senadores propios y de fuerzas asociadas, el kirchnerismo pone en juego 17 bancas de la Cámara Alta en las elecciones legislativas de este año. Aún ganando los ocho distritos que renuevan senadores, algo que aparece como imposible a priori, perdería un escaño; por lo que para mantener o ampliar su bloque tendría que ganar y salir segundo en una o más provincias.

Los distritos que renuevan bancas este año son la Ciudad de Buenos Aires, Tierra del Fuego, Entre Ríos, Salta, Neuquén, Chaco, Río Negro y Santiago del Estero. La elección comprende tres senadores por distrito, dos de la lista ganadora y uno de la que obtenga el segundo lugar en cada provincia.

El Frente para la Victoria es el partido que mayor cantidad de bancas pondrá en juego, ya que son 17 los senadores, entre propios y aliados, a los que se les vence el mandato el 9 de diciembre de 2013. Si ganara en los ocho distritos, el kirchnerismo lograría 16 senadores, pero esa circunstancia es muy poco probable en al menos un distrito de los que eligen a sus senadores: la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Si así fuera, el kirchnerismo necesitaría ganar y salir segundo en al menos dos provincias para mantener el mismo número de senadores de la actualidad. Para esto necesitaría una ingeniería electoral sofisticada que le permitiera a sus candidatos en al menos dos provincias encabezar la lista ganadora y la perdedora.

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