Por Celia Toledo
Para Infonews
Si algo resulta realmente complejo para quienes integran la Asociación de Enfermitos de diálogos de los Simpson, es elegir sólo un diálogo de la famosa serie. Los 11.355 usuarios del grupo en Facebook conocen los detalles de cada personaje, mantienen frescas casi todas las escenas, y basta con que alguno publique un comentario en el muro del grupo para que se disparen cientos de chistes.
Julián Jaure, responde a la pregunta de por qué Enfermitos, con otro interrogante: “¿No es un poco enfermo relacionar todo con los Simpsons?”. Y así explica el nombre del grupo. El relato de Gabriel Romano, otro de los miembros, va en el mismo sentido. “Los diálogos de los Simpson pueden utilizarse en la vida cotidiana para responder casi a cualquier escenario. Eso es lo que hacemos como grupo, seguimos una línea de disparates”, comenta, y hace referencia a los más de 400 comentarios que los usuarios hicieron a la consigna lanzada por INFOnews en la página del grupo, para contactarse con los Enfermitos.
Aunque por ahora la interacción de los Enfermitos de Diálogos de los Simpson es sólo virtual, muchos se entusiasman con la idea de un encuentro cara a cara. Santiago Cremona explica que el objetivo de esta comunidad entrelazada por el fanatismo hacia la serie, es “pasar un rato, riéndonos y comentando los diálogos con las voces de los personajes en nuestras cabezas. A todos nos pasa igual”.
Los Enfermitos se conectan para recordar las frases más memorables de los Simpson y volver a divertirse con ellas. “A veces ni la frases se suben, con una imagen está todo dicho”, precisa Darío otro de los usuarios.
Para no sentirse tan “enfermo”
Cuando llega la noche del domingo, y los capítulos son transmitidos por televisión, la actividad en el muro del grupo estalla. “Comentamos los diálogos del programa. Es una forma de estar acompañados con otros fanáticos, saber que alguien te entiende cuando hablás de eso, y no sentirte tan enfermo” bromea Santiago.
"Lisa Simpson es una niña de mi escuela", "casi me muero!", "yo soy el que va ahí a romperme el alma, y tu estás afuera de lugar, todo el maldito sistema está fuera de lugar, ¿quieres la verdad? ¿Quieres la verdad? ¡Tu no puedes manejar la verdad!”, son tres de las frases favoritas de los Enfermitos, aunque los monólogos de Homero Simpson generan devoción.
Para este grupo, mayoritariamente joven, la serie estuvo allí desde siempre. “Los empecé a ver desde muy chico,aunque no tengo recuerdo de cuándo fue la primera vez. Fue por mi hermano, y desde siempre a toda hora los miro y me río como la primera vez. No sé qué haría si me faltaran. Es como una religión para mí”, comenta Santiago.
Darío Piñeiro reconoce que está “bastante mal de la cabeza” porque “a todo le meto Simpson”. ¿Qué tiene que tanto fascina esa serie de dibujitos amarillos? “Me parece que el éxito radica en que son como nosotros. Más allá de ser una parodia del estereotipo de la familias yanquis, cada familia es un mundo y todos estamos bastante locos puertas adentro”, explica Darío como si los televidentes aprovecharan la serie para reírse de sí mismos. Y reconoce: “Me han educado más los Simpson que mi propia familia”.
Para Martín Dindurra “uno de los mejores capítulos es el que el señor Burns es un extraterrestre”, aunque lanzar esa afirmación al interior del grupo de Facebook generaría un debate casi tan grande como qué fue primero, si el huevo o la gallina.
Detrás del fanatismo que tienen los Enfermitos hay una lectura sobre el mensaje del programa. “Es una serie que trata los temas cotidianos de una sociedad común, y los pone en ridículo para que te des cuenta de lo que pasa, y de lo burlesco que es”, resume Martín, uno más de todos los Enfermitos que no sólo se siente atraído por la estética de la serie más popular, sino por el trasfondo que narra.