Acusan a un islamista belga de ser el cerebro de los atentados de París

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Fuentes judiciales francesas y belgas coincidieron en señalar a Abdelhamid Abaaoud como el autor intelectual de los atentados perpetrados en París el viernes 13 de noviembre con al menos 129 muertos y cientos de heridos como saldo. Se trata de un yihadista belga de 29 años, que se encuentra actualmente en Siria, de acuerdo a los trascendidos que las autoridades de Francia y Bélgica filtraron a los medios.

Según la agencia Reuters, que cita distintas fuentes de la investigación, Abaaoud era el presunto jefe de la llamada red terrorista de Verviers, desmantelada en enero por la policía belga. Durante la operación, dos islamistas perdieron la vida y un tercero resultó herido. Abdelhamid Abaaoud fue condenado en ausencia a 20 años de prisión.

En cuanto a su conexión con los ataques de París, el diario Le Monde indica que es un allegado de Salah Abdeslam, un islamista que participó en los atentados y hermano del kamikaze que activó sus explosivos en el bar Comptoir Voltaire, en el distrito 11 de París. Asimismo, ambos estuvieron encarcelados juntos en 2010 en Bélgica por asalto a mano armada.

El nombre de Abdelhamid Abaaoud aparece también en los casos del intento de atentado contra una iglesia en Francia el 19 de abril de 2015, un plan fallido contra una sala de conciertos o el ataque al tren Thalys del 21 de agosto. Por otro lado, estuvo en contacto con Mehdi Nemmouch, autor del ataque contra el Museo Judío de Bruselas, el 24 de mayo de 2014.

Su presencia es por otro lado habitual en internet. Aparece en un video en el que se burla ante cámara mientras conduce un vehículo que arrastra cadáveres hacia una fosa común. Su hermano cobró notoriedad en 2014 tras ser eliminado en Siria, a donde había viajado con sólo 13 años. Se lo llamó entonces “el yihadista más joven del mundo”.

El ministro de Interior francés, Bernard Cazeneuve, sólo dio a la prensa un nuevo parte de los operativos policiales: las fuerzas de seguridad galas realizaron 168 nuevas redadas entre anoche y esta mañana, que dejaron un saldo de 23 detenidos, 104 arrestos domiciliarios y un lanzacohetes y varias armas automáticas incautadas.

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"Que le quede claro a todo el mundo, esto es sólo el principio, estas acciones continuarán", prometió Cazeneuve, citado por la agencia de noticias EFE.

El propio presidente Francois Hollande describió en muy pocas palabras cuál es la principal hipótesis de la investigación que busca determinar quiénes fueron los responsables de los peores ataques que ha sufrido el país desde la Segunda Guerra Mundial y llevar ante la Justicia a todos aquellos que colaboraron o trabajaron junto a los siete atacantes muertos.

"Los atentados fueron planificados en Siria, organizados en Bélgica y cometidos en nuestro suelo, con complicidades en Francia", resumió el mandatario en una sesión extraordinario de las dos cámaras del Parlamento en el Palacio de Versalles, en las afueras de París.

En los últimos dos días, la Fiscalía belga informó que al menos dos de los siete atacantes vivían en Bruselas y en el municipio vecino de Molenbeek, y además destacó que los dos autos que fueron utilizados por los agresores, según confirmaron las autoridades galas, fueron alquilados y tenían patentes de Bélgica.

La conexión con ese país vecino está en el corazón de la investigación que encabeza la Fiscalía de París.

Durante el fin de semana, Bruselas detuvo a siete sospechosos y este lunes acusó formalmente a dos de ellos del delito de terrorismo, según informó la Fiscalía federal belga. El resto fue liberado por falta de pruebas.

Uno de los liberados fue Mohamed Abdeslam, el hermano de Ibrahim, el atacante suicida que se inmoló en el Comptoir Voltaire, uno de los bares parisinos atacados en la noche del viernes, y de Salah, el joven de 26 años que las autoridades francesas y belgas buscan frenéticamente desde ayer por su "vinculación directa" con los atentados.

La Policía federal de Bélgica volvió a realizar masivas redadas en el municipio de Molenbeek, el lunes en la mañana, en búsqueda de Salah Abdeslam y, pese al enorme operativo de seguridad, terminó sin resultados, según informó la Fiscalía local.

Al salir en libertad, Mohamed Abdeslam dijo que no puede "decir cómo ni por qué sucedieron los hechos en París", protagonizados por al menos uno de sus hermanos.

"Mis hermanos son hombres grandes, no les preguntamos qué hacen. Aun si algunos pueden pensar que soy falso, mi familia y yo estamos muy conmovidos, pensamos en las víctimas, pero tienen que entender que para mi madre siguen siendo sus hijos", explicó el joven a la prensa, según el diario francés Le Monde.

Según el relato que brindó la Fiscalía francesa, la serie de atentados de París estuvieron coordinados por tres grupos de al menos siete atacantes, que en apenas unos 40 minutos golpearon primero las afueras del Stade de France, donde el presidente Hollande seguía desde un palco el amistoso de fútbol entre las selecciones de Francia y Alemania.

Minutos después tiroteos y bombas sacudieron a tres restaurantes y dos bares del centro de París y, finalmente, tres atacantes armados con fusiles Kalashnicov y chalecos con explosivos irrumpieron en el teatro Bataclan en medio de un recital de rock y masacraron a 89 personas tras una larga toma de rehenes.

El EI, la milicia que nació bajo la ocupación estadounidense en Irak y creció al calor de la guerra civil siria en los últimos dos años, se adjudicó la autoría de los atentados y este lunes, a través de dos nuevos videos difundidos por internet, amenazó con repetir los ataques contra Estados Unidos y sus aliados.

Pese a que Hollande rápidamente declaró la "guerra" contra este grupo armado, hasta ahora se conoce poco de la vinculación entre los atacantes y el EI.

Siete agresores fallecieron en los ataques, pero hasta ahora medios franceses identificaron a cinco de ellos.

Además de Ibrahim Abdeslam, los principales medios de Francia identificaron a dos de los tres atacantes que se inmolaron dentro del teatro Bataclan: Ismael Omar Mostefai, un joven de 29 años que nació en los suburbios de París y que sólo tenía antecedentes por delitos menores, y Samy Amimur, un joven de 28 años, también oriundo de la capital francesa.

Además, informaron que Bilal Hadfi, un ciudadano francés que vivía legalmente en Bélgica, fue uno de los tres que se inmolaron fuera del Estadio de Francia, mientras que otro de ellos sería un joven que entró a Europa desde Grecia como refugiado a principios de octubre pasado con un pasaporte sirio. La Fiscalía de París explicó el lunes que la huella dactilar de ese atacante coincide con la de un refugiado que fue registrado en la isla griega de Lesbos, adonde llegan cientos de miles de refugiados escapando de la violencia en Medio Oriente hace varios meses.

Sin embargo, destacó el informe oficial, aún no pudieron determinar si el pasaporte sirio a nombre de Ahmad al Mohamad, que se encontró cerca del cuerpo del atacante, es verdadero. En otras palabras, no está claro si el atacante realmente es sirio o no. Varios dirigentes de primer nivel de Europa advirtieron en las últimas horas que el documento podría ser falso y que las autoridades del continente deben ser muy cuidadosos de no dejar que esto afecte negativamente a las miles de personas que siguen llegando a las costas de Grecia en busca de refugio.

Fuentes: Télam / RFI

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