Una multitud recibió con fervor a Cristina Fernández de Kirchner en otra noche de vigilia frente a su casa de Recoleta como manifestación de apoyo ante el intento de proscribirla.
La titular del Senado llegó a su residencia en la esquina de Uruguay y Juncal cerca de las 21, donde fue recibida por manifestantes, con cantos de "Cristina presidenta", banderas y carteles.
Al bajar del automóvil, Fernández de Kirchner se acercó a dar la mano a quienes se encontraban cerca, junto a su custodia, agradeciendo el acompañamiento y con visible emoción.
Posteriormente se acercó a una señora que le entregó un cartel que recordaba la desaparición del estudiante Miguel Bru, y luego Fernández de Kirchner se subió sobre uno de los autos para hacer un saludo general a la militancia.
Momentos antes de entrar al edificio donde vive, la vicepresidenta volvió a saludar con una mano, mientras en el otro brazo sostenía un ramo de flores naranjas que le entregaron.