Las elecciones municipales de Godoy Cruz transcurrieron sin inconvenientes. Fueron las novenas del año, contando las municipales de Capital y San Carlos, las provinciales y las presidenciales, cada una su respectiva PASO, como la de Godoy Cruz.
Los candidatos votaron temprano sabiendo que el resultado estaba echado desde hace tiempo: el radical Tadeo García Zalazar sucederá al gobernador electo, Alfredo Cornejo, al mando de la Municipalidad que sólo es superada por Guaymallén en cuanto a cantidad de vecinos que viven en su jurisdicción en el Gran Mendoza.
García Zalazar dijo que la exigencia de los vecinos de su municipio tiene vara alta después de la gestión de su mentor, el actual intendente, con quien trabajó en la comuna antes de irse al Senado de la Nación con Julio Cobos cuando fue vicepresidente y, luego, ser diputado provincial. El candidato radical votó en la escuela Misiones, de Peltier y Figueroa Alcorta, con viento a favor para asumir en lugar de Cornejo. La proyección de las PASO ponía al radicalismo cerca de conseguir cinco de seis concejales en juego, como finalmente ocurrió.
Ilardo, dirigente de La Cámpora dentro del herido peronismo mendocino, sabedor de su derrota instó a su partidarios a "resistir" las políticas que vienen. El camporista fue a votar con su mujer, la senadora nacional electa y líder provincial de La Cámpora Anabel Fernández Sagasti. Sufragó en la escuela Regalado Olguín, del barrio Covimet 3.
El peronismo mendocino está sumido en una crisis interminable culpa de la decisión de adelantar el proceso electoral provincial con motivo de considerar que la presidenta Cristina Fernández les haría perder la Provincia si se elegía el gobernador y el presidente en el mismo acto. Los camporistas son kirchneristas antes que peronistas. La grieta interna será tratada en el seno del PJ después de que se cuenten los votos de Godoy Cruz.
El peronismo quedó trizado por todos lados después de las sucesivas derrotas electorales de este año. Perdió la Presidencia y la Gobernación, salvando sólo seis de las 12 comunas que tenía. La estrategia que llevó al peronismo mendocino al final trágico en términos de poder cuando la persiana del año electoral fue responsabilidad de Francisco Pérez, Carlos Ciurca y Juan Carlos Mazzón, quien se murió en pleno proceso electoral, dejando acéfalo al poderoso sector azul, que tiene cuatro de los seis intendentes peronistas que quedarán en pie después del 10 de diciembre.