El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, condenó la represión ejercida por la policía tucumana durante una movilización en la Plaza Independencia, donde miles de personas se manifestaron en contra de lo que consideran "fraude" en las elecciones del pasado domingo.
"No me satisface la represión. Estoy en contra de la represión, pero también veo que esto tiene que ver con una profecía autocumplida donde dirigentes de la oposición toda la semana pasada estuvieron denunciando posibilidades de fraude", afirmó.
Siguiendo esta línea, el funcionario nacional consideró que "los incidentes están orbitados desde afuera para deslegitimar las elecciones".
"Estoy en contra de la represión, pero también veo que esto tiene que ver con una profecía autocumplida donde dirigentes de la oposición toda la semana pasada estuvieron denunciando posibilidades de fraude", afirmó Fernández al ingresar en la mañana del martes a la Casa Rosada.
En su habitual contacto con la prensa, añadió que "toda la modalidad excede el manual de Jaime Durán Barba y tiene que ver con las acciones del Norte, que buscan deslegitimar las elecciones y tiene en sus voceros a personas como Laura Alonso (diputada del PRO)y Elisa Carrió".
