El juez de Jáchal Pablo Oritja presume que la causa del derrame de la Barrick en Veladero se produjo por una sobreexplotación de la mina de oro. Así lo asentó en una resolución el juez que investiga las causas y consecuencias del incidente ambiental conocido hace dos meses.
El magistrado resolvió favorablemente dos recursos de amparo planteados para motivar el cese de la producción. La sentencia revela, además, los resultados de los monitoreos encargados por la firma tras la fuga, que confirman que se produjo un daño ambiental en la zona, resumió Infobae.
Oritja se expidió el 29 de octubre ordenando a la compañía minera de Peter Munk recomponer las condiciones de producción previstas cuando se determinó el impacto ambiental de la explotación.
Consideró el juez que "la existencia de esta situación anómala incrementa el riesgo de que por factores externos e imposibles de manejar se produzca un aumento aún mayor de la cota (nivel) del sistema de lixiviación y que éste llegue al nivel de vertedero y vuelque su contenido hacia el subdren potrerillos".
Para el juez, hubo una falla mecánica que propició el derrame, pero eso fue ayudado por las condiciones de sobreexplotación. "Si bien la fuga de solución lixiviante obedeció a una falla técnica (rotura de una válvula de venteo), que no tenía que ver con la anomalía del exceso de agua en el sistema de lixiviación, la condición determinante para que dicha fuga llegara al Valle de Potrerillos (compuerta abierta) sí se encontraba directamente relacionada con dicho problema", consignó en un fallo que otorgó la razón a dos amparos contra las actividades de la Barrick.
"La cota sube o baja según el nivel de explotación. Al día de la sentencia, Veladero llevaba 68 días cerca del desborde así. ¿Por qué? Porque estaban sobreexplotando el yacimiento, para acortar el plazo de explotación, agotarlo lo antes posible y reducir los costos", agregó el juez.