La jueza federal María Romilda Servini de Cubría y el fiscal Franco Picardi denunciaron este miércoles a los funcionarios judiciales que ordenaron el allanamiento en la casa de la ex mujer del prófugo Ibar Esteban Pérez Corradi. El operativo se fundó en informes de inteligencia falsos y derivó en la matanza de dos perros por parte de los efectivos policiales que intervinieron frente a los hijos menores del acusado de ordenar el Triple Crimen de General Rodríguez en el marco de una venganza narco.
El juez de Garantías de San Isidro Diego Martínez y del fiscal Federico González, quienes dispusieron el allanamiento en la casa de Liliana Aurehhuliu, fueron denunciado por haber ordenado la acción sin pruebas que fundaran la necesidad del violento allanamiento, que a los fines de la investigación del paradero del prófugo resultó un fisco.
Una de las denuncias recayó en manos del juez Norberto Oyarbide y la otra en su par Luis Rodríguez, al considerar que el allanamiento se realizó "sin justificación suficiente".
El procedimiento en un domicilio de Don Torcuato se hizo en base a la declaración de dos integrantes de la Dirección Departamental de Investigaciones de San Isidro, a partir de dichos de personal de la Agencia Federal de Investigaciones (exSide).
Para los abogados de Pérez Corradi, la entrada a los tiros en la casa de los hijos de Pérez Corradi no obedeció al argumento esgrimido por los funcionarios judiciales que ordenaron el allanamiento, sino a una estrategia para amedrentar al prófugo poniendo en riesgo a sus hijos.
