La compañía de Mercedes Benz en Vitoria puso sobre la mesa las condiciones para la firma del nuevo convenio colectivo en la fábrica: el grupo alemán propone jornadas laborales de 10 horas, que los sábados se trabaje y que haya menos pluses con el fin de "asegurar la rentabilidad de la inversión realizada" para la producción de los nuevos modelos Vito y Clase V y "garantizar la continuidad futura del negocio ante los accionistas".
Ahí no queda la cosa. Piden establecer “turnos de 10 horas diarias de lunes a sábado a dos turnos, garantizando 4 días de presencia semanal”, con un aumento en tres días de las jornadas laborales anuales (hasta 217). Además proponen establecer modelos de trabajo que arranquen la noche del domingo y concluyan la tarde del viernes, y fijan el periodo de vacaciones entre mayo y octubre, con posibilidad de tener una semana durante todo el año.
En cuanto a los salarios la empresa propuso eliminar los pluses de los sábados y de los días activables, así como reducir un 20% el resto de pluses. También, acabar con el “concepto ” y ligar los incrementos salariales a la productividad de la empresa, adaptando el pago variable a la evolución y el salario de la compañía.
Además aboga por establecer nuevos salarios de entrada y ampliar de 5 a 7 años el tramo formativo, elevando los salarios en función del desarrollo profesional de los trabajadores.
Por último propone adaptar las dietas al modelo alemán y modificar la regulación de las pausas, así como los permisos y licencias.
