Al pasar por el palco oficial, la columna de ATE enfrentó el ministro de Hacienda, Martín Kerchner, con sus reclamos salariales: "No queremos que demonicen al trabajador estatal, queremos ser personas y ciudadanos respetables, no queremos que nos utilicen a los trabajadores como trapo de piso", arrancó Roberto Macho.
Luego, ante un cúmulo de periodistas que a esa hora eran un enjambre intentando entrevistar a los ministros provinciales y nacionales, siguió el sindicalista: "No somos esclavos del gobierno nacional y provincial, queremos paritarias libres". Y le entregó folletos a Kerchner pidiendo que se paren los despidos y el ajuste.
El ministro, a su turno, dijo que todo lo que reclamaba Macho "hay que hacerlo en el marco de la razonabilidad y dentro de las posibilidades. Y para eso hay que tener diálogo".
Raquel Blas, por su parte, lanzó hacia el palco oficial carteles en repudio a los despidos de la gestión macrista, con insultos a los ministros enviados por Macri en su representación a la fiesta de los bodegueros.
Poco antes de este cruce en el Carrusel, Cornejo ponderó el trabajo privado, del que dijo es "el genuino antes que el público", y pidió terminar "con los bolsones de improductividad" en el Estado.