Bernie Sanders ganó el sábado las primarias del Partido Demócrata en el estado de Wyoming, superando a su rival Hillary Clinton mientras se preparan para una crucial contienda en Nueva York para definir al nominado demócrata para las elecciones presidenciales del 8 de noviembre en Estados Unidos.
Sanders, senador por Vermont, está tratando de reducir la amplia ventaja de Clinton en el número de delegados necesarios para asegurar la nominación del partido.
Los 14 delegados demócratas de Wyoming -el menor número que en cualquier otro estado- serían repartidos proporcionalmente y no ayudarán mucho a Sanders para acortar la brecha con su rival.
Antes de las primarias de Wyoming, Clinton contaba con más de la mitad de los 2.383 delegados necesarios para ganar la nominación y llevaba una ventaja de más de 250 sobre Sanders. La brecha aumentaba cuando se incluía el número de superdelegados en el conteo, que son líderes demócratas que pueden decidir a quién respaldar durante la convención del partido en julio.
Sanders y Clinton estuvieron haciendo campaña el sábado en Nueva York, donde se llevarán a cabo las primarias del 19 de abril y donde están en juego un total de 291 delegados.
La ex secretaria de estado considera a Nueva York como su territorio. Representó al estado como senadora e instaló la sede de su campaña en el distrito neoyorquino de Brooklyn.
Por su parte, Sanders ha recordado a los votantes que nació y fue criado en Brooklyn. Sondeos recientes han mostrado a Clinton con una ventaja de más de 10 puntos en ese estado.
(Editado en español por María Cecilia Mora)
Fuente: Reuters