El gobernador Alfredo Cornejo anunció la prórroga a la exención impositiva destinada a los dueños del negocio del champán. El perdón impositivo se prorroga ininterrumpidamente desde hace 11 años, pero en los últimos meses estuvo en dudas la continuidad porque el macrismo sólo firmó tres meses de prórroga mientras analizaba el futuro.
Los bodegueros dedicados a los espumantes encabezaron una movida política para salvar la exención que los beneficia. Y el martes Cornejo confirmó que Mauricio Macri había decidido darle continuidad a la política impositiva para el sector de los espumantes.
Quiero anunciar que hablé con @mauriciomacri y me anunció que prorrogará la exención del impuesto a los espumantes. pic.twitter.com/2q9IoXMp4h
— Alfredo Cornejo (@alfredocornejo) 20 de abril de 2016
"La prórroga es hasta fin de año", informó en una entrevista con la FM UTN el gerente de la Unión Vitivinícola, Sergio Vilanueva, quien celebró la medida, pero advirtió que la tarea que queda es operar una ley que sustente la exención. "La clase dirigente se ha movido bien en general", acotó el gerente que pesificó en unos 400 millones el impacto anual de la exención.
Hasta 2005, la venta de espumantes tributaba un impuesto de 12,7% por ser considerado un bien de consumo suntuario. Pero, en febrero de ese año, las bodegas acordaron con el entonces presidente Néstor Kirchner invertir el dinero que deberían pagar por ese tributo más un 25% extra en mejoras en bodegas y viñedos, a cambio de la exención. La medida apuntaba a impulsar las ventas y mejorar la calidad.
