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Un vocero de la Cámara de Diputados de Rusia consideró que el presidente Mauricio Macri resolvió bajar de la Televisión Digital Abierta al canal ruso RT (Rusia Today) para "caerles bien a sus patrones estadounidenses". La cadena Radio y Televisión Argentina Sociedad del Estado (RTA SE), que administra los medios de comunicación estatales del país, comunicó la decisión de suspender la emisión del canal de televisión de noticias RT en el país en un plazo de 60 días.
El director del Comité para Asuntos Internacionales de la Duma rusa, Alexéi Pushkov, dijo al portal de RT que el Gobierno argentino busca limitar la libertad de información en un intento para que los medios occidentales vuelvan a tener el monopolio en el país.
"Desde mi punto de vista la suspensión del canal RT en la programación de la televisión argentina refleja que el actual Gobierno del país busca reorientar sus políticas. Me refiero a que las autoridades anteriores apoyaban la idea del mundo multipolar y expresaban su interés en el acercamiento con Rusia y la participación en organizaciones políticas en las que EE.UU. no es miembro, como, por ejemplo el BRICS", sostuvo el vocero en cuestiones internacionales de los diputados rusos.
"Las autoridades argentinas quieren caerles bien a sus patrones estadounidenses. Quieren cambiar la situación política en su propia nación porque RT tiene una audiencia bastante grande en Argentina y eso es una muestra de la eficiencia de su trabajo", enfatizó contra la política macrista el representante de la Cámara Baja del Estado presidido por Vladimir Putin.
El mandatario ruso acordó con Cristina Fernández la inclusión de la señal de noticias de su país en el sistema de canales incluidos en la TDA. RT está al aire desde 2009. Es la primera señal rusa en castellano en el mundo. Se transmite en el país por esa vía desde 2014. La señal es parte del plan de Putin para poner un medio de su país a rodar con noticias a la altura de la BBC británica o la CNN estadounidense.
El canal cayó en la "limpieza" del kirchnerismo que se propuso como objetivo central de su función Hernán Lombardi, al frente del Sistema Federal de Medios y Contenidos Públicos. Con la guillotina cortó cabezas y cables considerados parte del mal a erradicar: la oposición al macrismo, sin privar a nadie de un juicio sumarísimo para probar el delito.
Las primeras víctimas del ex ministro de Turismo del gobierno fallido del radical Fernando de la Rúa fueron los trabajadores de 678 y el canal sudamericano de noticias liderado por Venezuela, Telesur, sacado del aire local por decisión de Lomabardi tomada a horas de desembarcar en el poder. La lista siguió hasta la caída de RT de la TDA.