El Liceo Militar Espejo como centro clandestino de detención y tortura de presos políticos durante el terrorismo estatal de los 70 fue puesto en foco este lunes en el alegato de la Fiscalía en el megajuicio de lesa humanidad contra exjueces, exmilitares y expolicías. En ese contexto, la Fiscalía acusó al exdirector del Liceo, Carlos Tragant, como autor mediato de secuestros, torturas, homicidios y desapariciones en esa institución castrense y lo propio corrió para el exoficial José Antonio Fuertes.
"En el Liceo Militar se ejercieron torturas tradicionales como encapuchamientos, tabicamiento, simulacros de ahorcamiento y demás, hay que desmitificar que se haya tratado de un hotel cinco estrellas, como incluso algunas víctimas han relatado, porque hay que poner en contexto esas condiciones de cautiverio. Ocurre que después de los padecimientos que sufrían en el D2 comparaban lo ocurrido con el Liceo. Sólo quienes pasaron por el D2 califican al Liceo como un hotel 5 estrellas", señaló el fiscal Daniel Rodríguez Infante.
"En el Nunca Más se señaló al Liceo Militar como centro clandestino de detención", puntualizó el fiscal. "Las víctimas no estaban registradas en ningún sitio como detenidas allí. Estaban secuestradas allí sin que hubiera registro, el carácter de detención era clandestino", agregó.
Rodríguez Infante señaló los testimonios de Marcos Garcetti, Carlos Abihaggle, Carlos Fiorentini y Rafael Morán, quienes pasaron por el Liceo como detenidos políticos.
El rol de Tragant
Carlos Horacio Tragant, ex oficial del Ejército, dirigió durante la dictadura el Liceo Militar Espejo y fue el primer gobernador defacto de San Juan. "Todo lo que ocurrió en el Liceo fue por orden de Tragant, él dejó por escrito todo lo que allí debía hacerse un mes antes, como acondicionar el lugar para que fuera un centro clandestino de detención", indicó Rodríguez Infante.
Tragant era el mandamás en el edificio del Liceo, centro de adiestramiento castrense donde se educan en modalidad de internado miles de jóvenes mendocinos, y funcionaba también un centro clandestino de detención, depósito, tortura y traslado de presos políticos.
"Es responsable y es culpable", remarcó Rodríguez Infante sobre Tragant.
Santiago Illia
El secuestro de Santiago Illia y su posterior ingreso al Liceo Militar fue uno de los puntos extensos del alegato que este lunes realizó Rodríguez Infante, quien se detuvo en los detalles de las torturas a las que fue sometido en ese lugar, y luego en la simulación que se hizo de su libertad.
"Se lo hizo desfilar delante de otros presos diciéndoles que salía en libertad, y lo mismo se le comunicó a la familia", indicó el fiscal ad hoc sobre Illia, que continúa desaparecido.
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