“Sin que nadie se las pida, me han hecho propuestas y algunas son buenas para la Argentina; mejores de las que tenemos. Ahora bien, esto es una negociación. Y si ellos me proponen eso, tal vez consigamos algo mejor".
Alberto Fernández describió en un párrafo la reacción de los acreedores forjados por el macrismo ante el resultado de las PASO sobre la mesa. En ese marco, el candidato presidencial del Frente de Todos puntualizó su plan para atacar la crisis financiera: un acuerdo a la uruguaya con los acreedores. Esto es, una ampliación temporal de lo vencimientos sin quitas de capital ni intereses a los bonistas.
“Vamos a ver lo que acepten los acreedores y lo que podamos ganar en favor de la Argentina”. La negociación final no empezó, pero los acreedores ya tendieron puentes hacia el equipo de Fernández.
La negociación será obligada, sea Fernández o Mauricio Macri quien gane las elecciones. La Argentina entró en default después de las PASO. La derrota desnudó el desastre de las las cuentas de Macri, maquillado hasta ahí por la posibilidad de la reelección.