Con elogios del peronismo al PRO -que hizo jugar la interna en la reforma de la Suprema Corte- el senado aprobó y convirtió en ley el proyecto que elimina el sistema de salas en el máximo tribunal. La iniciativa fue impulsada por el cornejismo con el propósito final de pulverizar la sala 2, penal y laboral, único bastión de poder que no le respondía por completo.
Hubo sólo 1 voto en contra, de Rafael Moyano, pero el PJ apoyó en mayoría el proyecto. Sus legisladores, además, expresaron elogios al PRO por frenar la votación tal como quería Cornejo, "algo que el peronismo no podía hacer", admitió Lucas Ilardo, el presidente de bloque.
Se refería Ilardo a que el oficialismo no necesita del PJ para aprobar proyectos -salvo la toma de deuda- porque le alcanza con los votos de propios y aliados. Sin embargo, Omar de Marchi (titular del PRO en Mendoza) se opuso a dar los votos e hizo pesar la interna que mantiene con Cornejo en la votación. De esta manera, a los alfiles del cornejismo no les quedó otra salida más que una negociación.
El proyecto volvió a la Suprema Corte, y los jueces -que no habían podido consensuar un proyecto propio en todo el año- aceptaron modificar la iniciativa. La eliminación de las salas pretendida por Cornejo se implementará indefectiblemente en 2023 (desde julio o diciembre, según haya acuerdo).
El PJ con loas al PRO: "Estábamos a un paso de la Mendoza del feudo y se frenó"
Aunque tuvo críticas al apuro de Cornejo de cambiar la Corte para eliminar salas, el PJ celebró que el proceso de discusión se haya estirado y que las reformas hayan sido consensuadas.
"Se priorizó por parte del PRO una Mendoza republicana e institucional sobre una Mendoza cuasi feudal", remarcó el sanrrafaelino Pedro Serra en su intervención.
"Voy a reconocer al presidente de la comision de LAC, Jorge Difonso (FR) por su ardua tarea, porque este fue un proyecto que llegó para salir en una semana. Tenia que ser de la forma textual como venia propuesto el proyecto. Tuvo un apuro injustificado. Debo reconocerle al oficialismo que supo reflexionar a tiempo antes que esto se convirtiera en un escándalo", agregó.
A su turno, Ilardo dijo que en 2015 se inició un "camino al feudo", pero destacó que éste fue un proyecto de consenso.
"El camino al feudo empezó en diciembre de 2015, con la intención de convertir a esta provincia manejada institucionalmente por una sola persona, donde se eliminaba a la oposición, eliminando todo mecanismo de control. Hoy todos los cargos permanentes están cooptados por una sola persona. por lo bajo y despacito muchos levantan la voz, aunque no lo hacen en público", arrancó Ilardo.
"La Contaduría, el procurador, la oficina de ética publica, el asesor de gobierno, ni hablar de la justicia. el ministro de Gobierno de Cornejo que hoy preside la corte, una jueza que no cumple con los requisitos para serlo, y que tuvo que jurar a escondidas, luego avalada por la corte con el voto de la corte que introdujo el exgobernador", siguió.
"El IPV, el Casino, Irrigación, hoy todos, toda representación de la oposición está destruida. No hizo mas que llegar Cornejo y modifico las reglas para que pudiera ser un abogado presidente del Tribunal, y no un contador. Arrasaron con todo, arrasaron con la justicia, destruyendo por completo el sistema de diálogo en la legislatura, nunca había existido el dominio total en la elección de jueces y fiscales. un fiscal osó investigar al hijo de Cornejo y lo removieron y lo mandaron a Tunuyán".
Luego enumeró causas por corrupción contra el oficialismo que no avanzan en los tribunales y subrayó: "En ese marco viene este proyecto de ley, que se anuncia en los diarios. Había que reformar la corte para que Suarez no tuviera que acudir a la legislatura por la deuda".
Después celebró que el oficialismo haya tenido que demorar un par de semanas para obtener las reformas que quería Cornejo. "Pasamos de Lombardi y Costarelli patoteando por los medios a 'estamos buscando consensos internos'. En ese momento había una sola posibilidad: que en el frente interno alguien dijera 'no'. Omar de Marchi es responsable de que este proyecto no haya salido como vino, El PJ no tenía la posibilidad de impedirlo.".
Se explayó: "Hubo una presión de Lombardi y el PRO resistió, como no consiguió los números, Lombardi toma el proyecto y lo manda a la corte".
Después elogió Ilardo al funcionario de Justicia de Conejo y Suarez, Marcelo D'Agostino, quien estuvo presente en el debate. "D'Agostino ayudó a los acuerdos. A veces en el sector del radicalismo si alguien busca un consenso se lo perjudica, porque al sheriff no le gusta eso. No hay motivos para festejar. pero sí para ilusionarse y pensar que los consensos triunfaron sobre la oposición. A veces tiene que salir el proyecto posible y no el que queremos, se le da tiempo a la Corte, y sale con el consenso casi unánime del arco político. Estábamos a un escalón de la Mendoza del feudo y se frenó".