La rectora de la UNCuyo, Esther Sánchez, ordenó finalmente ejecutar descuentos en los salarios de los docentes como castigo por la adhesión a la huelga en reclamo de mejoras salariales. Tras eso, partió a España a firmar convenios de cooperación con otras universidades.
En ausencia de la rectora comenzaron a llegar los bonos con los descuentos a quienes hicieron paro en tres semanas intercaladas desde marzo. Las quitas fueron ejecutadas por los días no trabajados de ese mes, del 13 al 18, mientras que los paros realizados en abril se descontarán en mayo.
La Fadiunc indicó que que los descuentos aplicados oscilaron entre el 15 y 20%, según cita diario El Sol.
“Desayunarnos en el Día del Trabajador que sufrimos descuentos por ejercer nuestro derecho a huelga nos parece algo brutal. Y más teniendo en cuenta el estado de la educación en general, donde el docente tiene que hacer un esfuerzo enorme para suplir esas deficiencias, incluso trabajando fuera de hora para lograrlo“, señaló al respecto Emiliano Diez, secretario general de Fadiunc.
Después de los días de huelga de marzo fue que Sánchez lanzó la advertencia del castigo que impondría en los salarios a los docentes, siendo la UNCuyo la única universidad que aplicó la sanción en el bolsillo de sus trabajadores. El Consejo Superior, dominado por el cornejismo, dio aval a la penalización.
Repudio nacional al castigo salarial de la UNCuyo contra los docentes que hacen paro
Ya con los paros de abril en marcha, la máxima autoridad de universidad pública desenvainó otra estrategia conocida por los docentes de Mendoza: enfrentar a los huelguistas con los padres de los alumnos, como hiciera José Thomas en los protestas durante 2022.
Las amenazas vertidas desde el Rectorado hicieron lo suyo mermando la adhesión en algunos colegios de la UNCuyo, pero las protestas y huelgas no cesaron, como tampoco otras formas de visibilizar los reclamos, como las clases públicas o las manifestaciones en las facultades y el propio rectorado.
