Javier Milei redujo de 6 a 3 meses la ayuda económica del Programa Acompañar -que es de un salario mínimo por mes-, destinado a mujeres y personas del colectivo LGBTI+ en situación de violencia de género.
Además, las víctimas ahora deberán acreditar su situación mediante una denuncia judicial o policial. En el decreto firmado por Milei, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, y el ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, se explica que “es prioridad adoptar los mecanismos necesarios para que los recursos con que cuenta el Estado se gestionen con criterios de eficacia, eficiencia y economía”.
Según detallaron, “para acceder a la prestación del programa Acompañar se requerirá acreditar la situación de riesgo por violencia por motivos de género mediante un informe social de un dispositivo de atención oficial de violencias local, provincial o de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires”.
"Asimismo, se requerirá acreditar la realización de la denuncia judicial o policial de violencia por motivos de género. Podrá requerir la prestación toda persona residente en el país que sea ciudadana argentina nativa, por opción o naturalizada; o extranjera con residencia permanente en la República Argentina, a partir de los dieciocho (18) años de edad”, explica la letra que lleva la firma del ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, y del jefe de Gabinete, Guillermo Francos.
Hasta el momento de los cambios, para acceder a la asistencia bastaba con presentar un informe social de un dispositivo de atención oficial de violencias local, provincial o de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA).
Para ejecutar el ajuste, los libertarios usaron la misma excusa que con los demás segmentos a los que les quitaron la ayuda económica: que estaban mal otorgados y se hará una auditoría.
El Ministerio de Justicia dijo textual: “Se detectaron numerosas irregularidades en el Plan Acompañar porque desde el ex Ministerio de la Mujer se entregaban los subsidios de manera discrecional y se utilizaban para hacer política”.
“Estamos realizando una auditoría para revisar lo que se entregaba y ordenarlo”, detallaron aunque aclararon también que no hay medidas paliativas previstas para las víctimas que denuncian y no cuentan con independencia económica.
El decreto entrará en vigencia hoy y tras las modificaciones argumentaron que el programa se creó con el objetivo de “promover la autonomía de las mujeres y personas LGBTI+ que se encuentran en riesgo acreditado por situación de violencia por motivos de género, mediante el otorgamiento de una prestación económica y del fortalecimiento de redes de acompañamiento, destinada a cubrir los gastos esenciales de organización y desarrollo de un proyecto de vida autónomo y libre de violencias”.