Tras el anuncio de la retirada de YPF de pozos maduros para concentrarse en el fracking en Vaca Muerta, la petrolera de bandera que hoy comanda Horacio Marín -hombre de Paolo Rocca- se niega a hacerse cargo de los pasivos ambientales que esos pozos dejan en Mendoza y otras provincias como parte del desprendimiento de los pozos de petróleo convencional enlistados en el denominado Proyecto Andes.
"El objetivo es desinvertir 55 bloques agrupados en 11 clusters que en total suman más de 34 mil barriles de petróleo diarios y casi 4 millones de metros cúbicos de gas", explicó el vicepresidente de Estrategia, Nuevos Negocios y Control de Gestión de YPF, Maximiliano Westen cuando se lanzó la iniciativa en febrero de este año.
Sin embargo, la negativa a remediar los pasivos ambientales frenó la compra de pozos. "El que compre las áreas se tendrá que hacer cargo del pasivo ambiental" afirmó Westen, citado por LPO, que calculó que recuperar cada metro cúbico vale alrededor de USD 150. Con una producción de 5000 MM3 promedio, para reparar el daño ambiental hay que desembolsar USD 750 millones.
De los 55 bloques, la petrolera estatal, de los cuales hay 14 en Mendoza, sólo logró avanzar con la venta de dos. Peco retornó al rubro como operador del bloque El Trébol Escalante en Chubut. Y Petrolera Comodoro Rivadavia (PCR) obtuvo la habilitación como operador del bloque de Llancanelo.
A comienzos de año Marín se reunió con Alfredo Cornejo con la venta de los pozos maduros en agenda y a mediados de noviembre volvieron a hacerlo para avanzar en un acuerdo por los pozos en Llancanello.
Junto a la ministra de @ambientemendoza, @JimehLatorre, recibimos al presidente de @YPFoficial, Horacio Marín, quien visita por primera vez Mendoza. Planteamos una agenda de trabajo para este año y analizamos detalles de proyectos conjuntos sobre las áreas convencionales maduras. pic.twitter.com/dK0ZXfKMSe
— Alfredo Cornejo (@alfredocornejo) February 8, 2024
"El gobierno de Mendoza nunca podría asumir esa responsabilidad que es solidaria y subsidiaria del generador de los pasivos, por ley general de ambiente", señaló una fuente del gobierno de Alfredo Cornejo a la publicación on line.
Amparo judicial en Mendoza
Tras el anuncio de la retirada de YPF de los pozos maduros que operaba en Mendoza para concentrarse en el fracking en Vaca Muerta, organizaciones sociales y un exsenador del FIT presentaron un recurso de amparo ambiental para obligar a la petrolera a reparar los pasivos ambientales y exigir al Gobierno de Mendoza a que no habilite la retirada de la empresa hasta que estén remediados los pasivos.
El amparo ingresó en el Juzgado Federal de Mendoza número 2, a cargo de Pablo Oscar Quirós.
El amparo pretende que YPF asuma, previo a la venta o cesión de áreas hidrocarburíferas, "la responsabilidad total y el costo de la reparación de los pasivos ambientales incluyendo la limpieza de suelos contaminados, la remediación de aguas subterráneas y superficiales, y cualquier otra medida necesaria para restaurar el ambiente afectado en las áreas que dispuso su venta o cesión.
