Antes, acordó con el vicegobernador y jefe de la campaña en Mendoza, Carlos Ciurca, que el mensaje proselitista en la provincia debe centrarse en la gestión de los intendentes, pero sin despegue nacional.
Francisco Pérez se encontró este miércoles con la presidenta Cristina Fernández por primera vez desde la derrota electoral a manos de Julio Cobos, uno de los enemigos principales del kirchnerismo en el país. El gobernador mendocino viajó a Buenos Aires tres días después de los comicios que marcaron una diferencia abrumadora a favor del radicalismo para ratificar su alineamiento con la Casa Rosada, a pesar de todos los análisis y advertencias que surgieron en la provincia respecto a la conveniencia de un despegue del modelo nacional para mejorar la perfomance electoral en octubre.
Lejos de distanciarse del gobierno nacional después de la derrota, Pérez ratificó el alineamiento. Antes, acordó con el vicegobernador y jefe de la campaña en Mendoza, Carlos Ciurca, que el mensaje proselitista en la provincia debe centrarse en la gestión de los intendentes. No obstante, la injerencia nacional seguirá siendo fuerte, como lo demuestra el viaje de Pérez el día después a la reunión con su vice en la provincia.
La concurrencia del gobernador de Mendoza a Tecnópolis, donde Cristina Fernández encabezó una convocatoria este miércoles es un mensaje a todo el peronismo local. Más allá de lo que se diga en reuniones o entrevistas mediáticas, el gobernador va a seguir firme junto al modelo nacional, cueste lo que cueste en términos electorales en octubre.
El acto que motivó el viaje de Pérez a Buenos Aires tuvo como fondo la presentación del Programa Agrovalor, una convocatoria para la creación de Unidades Productivas de Innovación Agropecuaria y Agregado de Valor (UPIAAV) en las universidades nacionales. Compartieron el escenario con la presidenta los ministros de Agricultura, Norberto Yauhar, y de Educación, Alberto Sileoni, cuyas carteras ejecutarán el programa que se puso en marcha.
