Al mismo tiempo, remarcó la responsabilidad del Estado español sobre la manipulación de los reclusos que luchan por la independencia de los vascos.
El denominado colectivo de presos de ETA (EPPK) declaró este sábado que "reconoce" por primera vez y con "toda sinceridad" el "sufrimiento y daño multilateral generados" y manifiesta su renuncia expresa "al método utilizado en el pasado para hacer frente a la imposición, represión y vulneración de derechos".
En un comunicado de dos folios enviado al diario Gara, el colectivo indica que asume "toda" su "responsabilidad sobre las consecuencias" de sus acciones. "Asimismo mostramos nuestra voluntad para analizar la responsabilidad de cada uno de nosotros, dentro de un proceso acordado que reúna las condiciones y garantías suficientes", aseguran.
El colectivo asegura que está dispuesto a tratar la opción de una "solución" a las "personas presas" dentro de un proceso "escalonado", "individual" y en un "tiempo prudencial". Afirman, asimismo, que "a partir de ahora" utilizarán "vías y métodos políticos y democráticos".
"Podríamos aceptar que nuestro proceso de vuelta a casa -nuestra excarcelación y de manera prioritaria nuestro traslado a Euskal Herria- se efectuase utilizando cauces legales, aun cuando ello para nosotros implícitamente conlleve la aceptación de nuestra condena", explica el EPPK.
Los presos remarcan su intención de iniciar contactos con el Foro Social y otros agentes vascos para buscar acuerdos y fórmulas de materialización para "buscar un amplio consenso que posibilite nuestro regreso a casa, enmarcado en un proceso integral, que no ponga en cuestión nuestro carácter ni dignidad política".
El EPPK utiliza la palabra "multilateral" al hablar del "sufrimiento" generado porque los reclusos recogen el lenguaje habitual de ETA sobre los efectos sobre el mundo de la izquierda abertzale ha provocado la política de dispersión de los presos por las cárceles de España y la lucha contra la banda, es decir, el daño que el Estado habría causado a ellos.
Los medios españoles señalan que tanto el Gobierno central como el vasco esperaban un comunicado de este tipo tras la sentencia que tumbó la llamada doctrina Parot y que posibilitó la salida de prisión de decenas de etarras: "La sentencia suponía, pese al rechazo que ha generado en el colectivo de víctimas, el funcionamiento de los controles de legalidad del Estado de derecho, y así fue interpretado también por amplios sectores de la izquierda abertzale".
"Todos los proyectos políticos"
EPPK indica que la normalización política se debe basar en la posibilidad de "desarrollar y llevar a cabo democráticamente todos los proyectos políticos". En este sentido, asegura que se debe evitar "cualquier salida parcial o falsa" para impedir que el conflicto se perpetúe y "no defraudar al pueblo y a su ciudadanía".
El colectivo de presos de ETA indica que la solución política debe ser "integral" y para ello, considera "imprescindible" que en el ámbito de las consecuencia del conflicto exista "una visión global que tome en cuenta y desarrolle todos su apartados".
En su comunicado, aseguran que es necesario derogar "toda situación y medida de excepción", así como adaptar el sistema jurídico a la actual coyuntura, "cambiar radicalmente" la política penitenciara y "priorizar" el fin de la dispersión. "Reconocer nuestros derechos, posibilitar nuestra vuelta a casa e impulsar la solución integral a la actual situación política", añaden.
En este sentido, el EPPK asegura que podrían aceptar que su proceso de 'vuelta a casa -nuestra excarcelación y, de manera prioritaria, nuestro traslado a Euskal Herria-, se efectuasen 'utilizando cauces legales, aún cuando ello para nosotros implícitamente conlleve la aceptación de nuestra condena'.
EPPK asegura que, a fin facilitar la "superación de las situaciones de excepción" de las cárceles, escucharán las propuestas y reflexiones de los distintos agentes y compartirá las suyas con "objeto de que las decisiones y pasos que se adopten para que el proceso avance sean compartidos y gocen del apoyo necesario".
El EPPK también hace un llamamiento a la ciudadanía, instituciones, agentes sociales y partidos políticos para buscar un "amplio consenso que posibilite su regreso a casa enmarcado en un proceso integral que no ponga en cuestión nuestro carácter y dignidad política".
"No es tiempo de ocultarse tras las dificultades e impedimentos es hora de la responsabilidad política, la de todos, también la nuestra en la medida en que somos parte y consecuencia del conflicto político", añade.
Según indica, el EPPK "no rehuirá sus propias responsabilidades" ni dependerá de los "movimientos de los demás para hacer los suyos". "Mostramos nuestro absoluto compromiso en ser un agente activo y eficaz tanto en el conflicto como en la solución. Haremos cuanto este en nuestra mano con total generosidad en la consecución de la Libertad de Euskal Herria. Euskal presoak Euskal Herrira (presos vascos a Euskal Herria), amnistía, autodeterminación", defiende.
"Condiciones de los presos"
En el comunicado, también denuncian "las difíciles condiciones y acoso" que padecen y advierten de que aunque la "represión carcelaria es siempre extrema, muy lejos de lo que cabía esperar tras la decisión de ETA de poner fin a la lucha armada, ésta no se ha flexibilizado e incluso en algunos casos se ha acentuado".
"Somos rehenes de los Estados español y francés y a través de sus funcionarios sufrimos el acoso del este sistema carcelario construido para aniquilarnos tanto a nosotros como a nuestro familiares y amigos", denuncian, para añadir "se sirven de leyes y medidas de excepción para negar los derechos y beneficios penitenciarios que nos corresponden a fin de obstaculizar la excarcelación".
Fuente: Huffington Post