Llamaron de urgencia a un plenario de todos los secretarios generales de los gremios afiliados a la central obrera local.
La conducción de la CGT Regional Mendoza convocó de urgencia a un plenario de secretarios generales después de que se anunciara la salida de Ariel Pringles de la Subsecretaría de Trabajo. El dirigente es secretario general del gremio de los trabajadores de la Justicia Federal e integra la mesa chica de decisiones de la central obrera a nivel provincial.
Los gremios alineados en esa entidad, que a nivel nacional reconoce al camionero Hugo Moyano como máximo conductor al mismo tiempo que trabajan en línea con los gobiernos nacional y provincial, discutirán cómo sigue la extraña trama de relaciones políticas que han construido desde fines de 2011, cuando alcanzaron la mayor porción de poder en la estructura del peronismo que gobierna la provincia de las últimas décadas al mismo tiempo que Moyano y el kircnerismo velaban su alianza.
La CGT tiene un senador provincial, José Scoda, líder de los trabajadores de las estaciones de servicio y un diputado, Claudio Díaz, de los viales. Y hasta ahora mantenía la subsecretaría de Trabajo, en manos de Pringles desde los albores de la gestión de Celso Jaque.
En el PJ de Mendoza, la CGT se alió con la Corriente Peronista, de Carlos Ciurca, Alejandro Abraham y Rubén Miranda. Hasta ahora, la conducción cegetista mantuvo un dificultoso equilibrio entre su afiliación moyanista y su alineamiento con Francisco Pérez. La salida de Pringles conmovió a esa arista del complejo conjunto de relaciones que definen la construcción política de la regional Mendoza.