Los mendocinos integran la nómina de candidatos del Frente Amplio-Unen con la mirada puesta en las presidenciales junto a Binner (FAP), Carrió (CC-ARI) y "Pino" Solanas (Proyecto Sur).
Por Martín Porto
Para Télam
Los radicales Ernesto Sanz y Julio Cobos buscarán afianzar su presencia en territorio bonaerense con el objetivo de apuntalar sus respectivas precandidaturas de cara al 2015, en el marco del Frente Amplio-Unen (FAU).
La interna por la renovación de autoridades de la UCR bonaerense, que actualmente encabeza el alfonsinista Alejandro Armendariz, será el escenario en el que Cobos y Sanz pelearán por captar el apoyo de la estructura partidaria en un distrito clave para sus aspiraciones presidenciales.
Los mendocinos integran la nómina de candidatos del Frente Amplio-Unen con la mirada puesta en las presidenciales del año venidero junto a Hermes Binner (FAP), Elisa Carrió (CC-ARI) y Fernando "Pino" Solanas (Proyecto Sur).
En ese marco, ya comenzaron los realinamientos internos de cara a los comicios previstos para el próximo 7 de septiembre, aunque los sectores mayoritarios de la UCR bonaerense consensuaron despegar la disputa Cobos-Sanz de la pelea por los cargos partidarios.
"Sanz sabe que necesita pisar fuerte en la provincia para mantener en pie sus aspiraciones presidenciales y para ello debe ganar espacio en la estrutura partidaria", de la UCR bonaerense, señalaron a Télam fuentes cercanas al titular del Comité Nacional.
Por ahora, el senador nacional cuenta con el apoyo de los Renovadores, de Sergio Panella y el sector que responde a Federico Storani, mientras el ex vicepresidente concita el respaldo del cobismo residual, como el intendente de Pergamino, Hector "Cachi" Gutiérrez y de algunos sectores del alfonsinismo.
En tanto, el Modeso, de Lopoldo Moreau, premanece neutral en la disputa entre los mendocinos, con quienes el histórico dirigente radical "mantiene diferencias idológicas", según comentaron a esta agencia fuentes del sector.
Con el objetivo de ganar terreno en suelo bonaerense, Sanz compartió la semana pasada con Storani una actividad partidaria en Villa Gesell y participó de un acto en la ciudad de La Plata, organizado por Radicales en Lucha, una agrupación que no está alineada con ninguna de las corrientes tradicionales del radicalismo provincial.
Cobos, en tanto, prepara su desembarco en territorio bonaerense con recorridas principalmente en los distritos agropecuarios del interior, donde cuenta con mayor nivel de "aceptación" debido al rol que jugó en el 2008 en la pelea por la Resolución 125, anticiparon fuentes cercanas al diputado nacional.
Con todo, desde el sanzismo y el cobismo aseguraron que la disputa interna entre los mendocinos se mantendrá "contenida" hasta el 22 de abril, día de lanzamiento del Frente Amplio-Unen (UCR, el FAP, la Coalición Cívica, Proyecto Sur y el Frente Cívico Cordobés), en el porteño teatro Broadway.
"Después del 22 es la gran explosión", graficaron cerca de Sanz, en relación a los realineamientos internos que se sucederán en el partido a nivel nacional, tras la presentación de esa coalición.
Sin embargo, el senador nacional ya empezó a jugar sus fichas en suelo bonaerense y lanzó al neurocirujano Facundo Manes como precandidato a reemplazar al Daniel Scioli en la gobernación, cargo para el que el alfonsinismo impulsa al diputado nacional y ex titular de la UCR bonaerense, Miguel Bazze.
"Pegarse a Cobos no le va a salir gratis al alfonsinismo porque a los radicales de pura cepa Cobos no le cierra", especulan desde el Comité Nacional, para quienes el virtual apoyo de esa facción al ex vicepresidente responde a un intento por "retener cierto nicho de poder" en la estructura partidaria.
Nada bien cayó cerca de Ricardo Alfonsín la aparición de Manes en la grilla de contendientes a la Gobernación, la que tomaron como un reto de Sanz en su propio distrito.
"Ernesto no puede bajar a la provincia a imponernos candidatos y menos desde la debilidad que él mismo tiene como aspirante a la Presidencia", dijo a Télam uno importante dirigente alfonsinista, en alusión a la baja intención de voto que -según marcan las princiaples encuestas- tiene el sanrafaelino en el electorado.