Fernando Pino Solanas puso en dudas su presencia en el encuentro que la dirigencia nacional del Frente Amplio Unen convocó para el domingo en El Manzano Histórico, de Tunuyán. Voceros del senador nacional adujeron razones de salud para justificar la duda sobre un potencial cruce cara a cara del dirigente con Elisa Carrió, el primero entre ambos luego del desplante que la diputada nacional le hizo a su socio electoral de 2013, el miércoles, durante el lanzamiento del FAU en la Ciudad de Buenos Aires.
Los líderes y presidenciables del FAU Hermes Binner, Julio Cobos, Ernesto Sanz y Carrió confirmaron que estarán en Mendoza el domingo. El frente que encabezan los radicales con los socialistas cruje por todos lados desde que se formó porque parte de la dirigencia que lo integra auspicia una alianza para 2015 con el macrismo y otra parte la resiste.
La confrontación existe desde el mismo lanzamiento del FAU, pero se fue haciendo visible con la aparición pública de la dirigencia sosteniendo las posturas antagónicas. La pelea se hizo crisis interna desde que Carrió se levantó y se fue en el medio del discurso de Solanas en el lanzamiento del frente porteño.
Carrió develó el pragmatismo absoluto de su postura a favor de contraer un compromiso electoral con el PRO. "Los intendentes y gobernadores (del frente) están hablando con el PRO porque quieren ganar las elecciones", dijo contra la posición de Solanas en defensa de los principios filosóficos que él cree debe sostener el FAU. "No hay lugar para la derecha moderna", espetó Pino.
Después del desplante a Solanas, Carrió recibió un espaldarazo del presidente de la UCR, Ernesto Sanz. Mientras que a favor de Solanas saltaron el GEN, de Margarita Stolbilzer, y Libres del Sur, de Tumini y Donda.
