La Selección del Tata Martino dejó una pálida imagen en la capital de China, donde cayó con Brasil por 2 a 0. Diego Tardelli, a los 27 del primer tiempo y a los 18 minutos del complemento, marcó para el seleccionado brasileño que conduce Dunga.
La base del equipo que armó Alejandro Sabella para llegar a la final del Mundial fue parteneire de la recuperación del clásico rival luego de la pésima actuación en su propia Copa del Mundo.
La actuación argentina fue tan mala que hasta Lionel Messi, quien estuvo ausente en las jugadas trascendentes del encuentro, erró un penal.
En el inicio del partido el conjunto nacional insinuó un despliegue típico en un equipo de Martino: con toques entre compañeros intentando generar espacios para una descarga profunda, pero ese esquema se fue desdibujando con la mejor en la prestación del rival, que después de abrir el marcador nunca perdió el control del partido.
El avance del reloj en la segunda parte favoreció a Brasil, que esperaba abroquelado contra su área y salía cuando podía de contraataque. Argentina no tuvo ideas creativas ni movilidad receptiva para hilvanar jugadas de peligro.
Los goles de Brasil
