El presidente del grupo económico Los Grobo, Gustavo Grobocopatel, destacó que este año “fue complejo” con “aumentos en los costos, la presión impositiva y algunos problemas climáticos, a lo que se sumó la caída drástica del precio de los granos”. Además, reconoció que fue una mala decisión la de los especuladores que acumularon granos a la espera de una estampida del dolar y seguida de una nueva devaluación.
El empresario resaltó que, cuando un productor decide almacenar sus granos, “lo que trata de hacer es cuidar su patrimonio para no fundirse. Creo que deberíamos estar todos contentos de que el productor trate de defenderse de esa situación. Por supuesto, fue una mala decisión guardarse los granos. Eso (la caída de los precios), muchos de los que estamos en el tema, sabíamos que iba a pasar, pero no así”.
“Es un año muy malo, no el peor”, disparó Grobocopatel, tras exponer en el encuentro TEDx organizado por el ITBA. Y si bien durante su charla se explayó sobre las ventajas de la unión campo-tecnología, el análisis de la situación que viven actualmente los productores agropecuarios ocupó toda la conversación.
En cuanto a los precios, el presidente de Los Grobo indicó que “es un año muy malo, no el peor. Es el peor en rentabilidad, porque otros años estos precios no tenían los costos o la carga impositiva que tiene hoy la producción. Es un año que va a generar pérdidas, quebrantos, donde los productores se van a descapitalizar o reducir sus actividades. Es lo que estamos viendo. Es lo que pasó con el trigo y lo que va a pasar con la cosecha gruesa”.
El “rey de la soja” evaluó a la revista Apertura que “estamos estamos cerca del piso del precio; obviamente, en los granos, el precio no es sólo oferta y demanda. Si fuera sólo por eso, los precios deberían subir. Pero también depende la relación entre el euro y el dólar, donde hay discusiones; el precio del petróleo”.
En referencia al próximo año, Grobocopatel señaló que “es un año político, los granos no distinguen de signo político. Y los productores tampoco. No tienen decisiones políticas. Son decisiones económicas, de pleno oportunismo económico”.
El ministro de Economía, Axel Kicillof, resaltó sobre la comercialización de granos que “existe una situación paradójica. El complejo sojero acumuló 24 o 25 millones de toneladas, guardaron la mitad de la cosecha. Uno se pregunta cuál es la racionalidad de esto. Hubo en enero y en agosto una orquestada campaña para disparar expectativas de movimientos cambiarios, y las condiciones financieras en Argentina, y guardaron granos como pocas veces, y el precio ha caído muy fuerte cerca del 25%”.
“A futuro el mercado está a la baja. Lo que decía es que quieren acumular la soja es porque esperan que suba o un movimiento cambiario fuerte”, indicó el ministro en declaraciones a Nacional Rock.
El titular de Hacienda enfatizó que “si optan por seguir acumulando soja todo indica que perderían más plata. Es malo para los comercializadores y también para los argentinos. La riqueza atesorada no cumple el fin social que conviene a todos. Si guardan la soja, no aparece en el mercado central sino en los silo bolsas. Claro que es de ellos pero como todo tiene un fin social”.
