La organización del superclásico previsto para el martes en el estadio Malvinas Argentinas de Mendoza, decidió poner en práctica el derecho de admisión para los fanáticos de Boca y River que lleguen a ver el juego. La medida será aplicada por los policías destinados por el Ministerio de Seguridad en el marco de un operativo que desplegará a 1.500 efectivos desde Desaguadero hasta el estadio durante gran parte de la jornada del martes.
Previendo una lento tránsito de los espectadores desde las inmediaciones del estadio hasta sus lugares en las tribunas, se abrirán las puertas de ingreso para populares y plateas a las 18, cuatro horas antes del inicio del juego.
Por seguridad, los organizadores se perdieron de vender más de 7.000 tickets, lo que equivale a medio millón de pesos. Después de los serios incidentes durante la venta de entradas en la sede del diario Uno y la Federación Mendocina de Box, entre hinchas y policías, los organizadores le comunicaron al Ministerio de Seguridad la decisión de impedir el ingreso de los barras peligrosos identificados por los clubes.
"Teniendo el derecho de admisión en vigencia, nosotros tenemos un amplio margen para poder actuar y definir algunas cuestiones que aún sin el derecho de admisión serían lógicas, como por ejemplo, tratar de evitar que se mezclen con el público los alcoholizados, los que estén un poquito más pasados por algunas otras sustancias”, le dijo el ministro de Seguridad Carlos Aranda a radio Nihuil.
