Por Oriol Domènech
Para Mundo Deportivo
El Barça sigue apretando al Real Madrid. Horas después de que los blancos hayan goleado al Getafe, los azulgrana han refrendado la buena imagen que ofrecieron contra el Atlético y han superado cómodamente a un Depor muy blando en Riazor (0-4), aunque gracias no solo a su mejor fútbol sino también a la siempre desequilibrante actuación de Leo Messi, que ha sentenciado el encuentro con dos goles en la primera mitad y ha completado su enésimo ‘hat trick’ como azulgrana en la segunda.
Luis Enrique, por primera vez después de 29 partidos, ha repetido alineación, la que se exhibió hace siete días en el Camp Nou frente a los de Simeone. Y la que se perfila para encarar la recta final de la temporada, con la salvedad de Ter Stegen en la Champions y con Mathieu y Xavi, que arrastran diversas dolencias, en la recámara. Los azulgrana han dominado desde el pitido inicial, contra un Depor muy defensivo (4-5-1) que ha renunciado al balón y que ha recurrido a los desplazamientos largos a Oriol Riera como principal argumento atacante.
Tras unos compases iniciales de control y juego horizontal, el Barça ha abierto la cuenta en la segunda ocasión que ha generado. La primera ha llegado a los nueve minutos, en una acción a balón parado de la factoría Unzué. Rakitic ha botado un córner raso hacia el punto de penalti, donde Messi, aprovechándose de diversos bloqueos, ha rematado libre de marca, pero Fabricio ha enviado el balón a córner. La segunda, solo un minuto después y con idénticos protagonistas. El croata, en posición de interior derecho, ha centrado con potencia y colocación hacia el área y el argentino, rompiendo la defensa en línea del Depor, ha firmado el 0-1 con un potente y colocado testarazo. Un tanto que recordó al que marcó al Manchester United en la final de Roma, según admitió el propio Leo en la Gala del Balón de Oro el mejor que ha marcado en su vida, y con el que ha roto una mala racha de 106 días sin marcar fuera de casa.
Con el marcador a favor, los azulgrana han jugado a placer. Suárez, de nuevo tras romper la línea local y recibir una magistral asistencia de Iniesta por encima de los defensas, ha fallado una oportunidad clarísima, con Messi completamente solo a su lado.
El Depor ha empezado a combinar mejor en corto y a llegar también con peligro al área de Bravo. Aunque la primera vez ha sido tras un error de Piqué que ha permitido a Cavaleiro encarar al chileno, pero su disparo se ha ido a las nubes. Las dos siguientes han tenido como protagonista a un defensa, el central Sidnei, una al cabecear en el segundo palo una falta botada por Medunjanin y otra saliendo desde su propio campo al más puro estilo Beckenbauer. Antes de pisar el área azulgrana, ha abierto a Juanfran, que ha centrado para un Cuenca impreciso en el remate.
El Barça, sin forzar la máquina, ha ido generando peligro con un Neymar espectacular en el uno contra uno y un Messi activo desde el extremo derecho que ha sentenciado el encuentro a los 32 minutos. Con un gol que, si el primero se ha parecido al de Roma, ha sido similar al que anotó ante el Arsenal en el Camp Nou en 2011, en Champions. Si en aquella ocasión superó a Almunia con una sutil vaselina antes de marcar de volea a puerta vacía, hoy no ha necesitado ni el segundo toque para firmar el 0-2 tras levantar el balón, con calidad y sangre fría, por encima de Fabricio.
Víctor Fernández, para evitar la goleada, ha dado entrada en la reanudación a José Rodríguez por Cavaleiro y ha enviado a Cuenca a la banda izquierda. No ha servido de mucho porque el partido ha transcurrido exactamente igual que en la primera mitad, con un Depor esperando atrás y un Barça muy superior. Tras dos oportunidades desaprovechadas por Suárez, asistido por Neymar, y Juan Domínguez, ha sido de nuevo Messi quien ha visto portería. Ha botado un córner en corto con Rakitic, que le ha devuelto el balón con un pase inteligente con el que ha superado la presión de dos deporrtivistas y tras recibir de nuevo ha entrado en el área y se ha sacado un zurdazo colocadísimo al palo largo, inalcanzable para Fabricio.
Luis Enrique ha dado descanso a Busquets e Iniesta y el Barça, pese a reservar energías de cara al importante compromiso copero ante el Atlético del miércoles en el Camp Nou, se ha encontrado con el 0-4, un afortunado tanto de Sidnei en propia puerta tras un centro de Dani Alves.