El presidente del Barça deslizó que el PP le factura el apoyo del club a la independencia catalana

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El presidente de Barcelona, Josep María Bartomeu, insinuó que al club le hicieron una guerra en el ámbito judicial el gobierno de Mariano Rajoy por su el apoyo al movimiento independentista catalán y del Real Madrid en venganza porque Neymar eligió la camisete blaugrana cuando le ofrecían más plata para lucir la merengue.

En su descargo, Bartomeu argumentó contra el Real Madrid, al que consideró implicado en el proceso judicial que investiga el traspaso del futbolista brasileño Neymar y en el que el dirigente ha sido llamado a declarar como imputado.

"Algunos clubes querían a Neymar pagando incluso más dinero, no lo consiguieron. Y esto no ha gustado. Alguien ha traspasado una línea roja", dijo Bartomeu en un canal de televisión español.

"No voy a decir que el Madrid está detrás de esto, pero el padre de Neymar dijo que tuvo dos ofertas: Barça y Madrid (...) Neymar hace un año estaba jugando bien y salió el asunto de la querella. Igual a alguien no le gustó. Ahora vuelve a jugar bien y hay otra movida judicial", agregó.

Bartomeu también insinuó una campaña política contra el club en relación al papel que ha jugado Barcelona en la campaña independentista catalana.

"Hace un año cedimos el Camp Nou para el 'Concert per la Llibertat', jugamos con (los colores de) la senyera (la bandera catalana), quizás esto no ha gustado", dijo.

"Veo factura deportiva y política, pero vamos a seguir trabajando para llegar al fondo de la cuestión. Mi obligación es llegar al final de la cuestión. Estamos pagando una factura política", agregó.

Bartomeu será interrogado el 23 de febrero sobre si Barcelona y sus directivos defraudaron al fisco español con 2,8 millones de euros (3,21 millones de dólares) durante el ejercicio fiscal de 2014.

El conjunto culé había dicho inicialmente que el costo del traspaso de Neymar desde el Santos había sido de 57,1 millones de euros, pero el caso fue denunciado por un socio azulgrana que buscaba más transparencia sobre el acuerdo.

El ex presidente Sandro Rosell dimitió en enero de 2014 después de que un juez decidiera iniciar la investigación y lo llamara a declarar.

Bartomeu sustituyó a Rosell y dio nuevos detalles sobre el traspaso, que revelaron que la cantidad había sido de 86,2 millones de euros contando los pagos al jugador y su familia.

El juez Pablo Ruz considera que hay suficientes indicios para investigar si se dejó de pagar un impuesto correspondiente a parte del traspaso al comienzo de la presidencia de Bartomeu el año pasado.

 

 

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