Por Javier Polvani
@javierpolvani
El peronismo mendocino no encuentra la fórmula para la gobernación aún. Las negociaciones las encabezan el operador Juan Carlos Mazzón, el vicegobernador Carlos Ciurca y el director de YPF por Mendoza, Omar Félix. Los líderes de los sectores Azul, Naranja o Corriente peronista e Integración buscan un dueto para candidatear contra los sectores marginales del justicialismo, el gobierno y los demás socios del Frente para la Victoria que promoverán al menos una lista, sino algunas más.
El rol del gobernador Francisco Pérez en la negociación es secundario, porque su lugar en la cabeza de la lista de diputados nacionales está condicionado a la incidencia que tenga Cristina Fernández en la definición de los postulantes al Congreso y de cómo se termine resolviendo la interna local. Mazzón, Ciurca y Félix negocian con independencia de las apetencias de Pérez, quien tiene en Matías Roby un candidato a sucederlo con cobertura mediática y recursos económicos para sobrellevar una campaña que está abierta a los aportes empresariales directos a los postulantes por decisión del mandatario provincial.
El entorno de Roby ha hecho saber a los sectores más poderosos del justicialismo local que el ministro de Salud "no se baja", aunque la última movida siempre está condicionada al poder del cargo en canje por la candidatura anunciada. Bajo el ala de Pérez, Roby está más condicionado que si, como temen Mazzón, Ciurca y Félix, se juega sólo a las PASO con el grupo de inversores que le garantizaron fondos para la campaña sin ser funcional al futuro del gobernador.
Otra vez, el candidato puesto del PJ es el ex intendente de Maipú y actual senador nacional, Adolfo Bermejo, quien sin embargo está a la espera de ser elegido como el postulante de la unidad peronista, sin tanta competencia en las PASO. Una lista en contra puede soportar el maipucino, más se niega.
En la rosca, Ciurca ha instalado que Rubén Miranda, intendente de Las Heras, irá de cabeza de lista de senadores nacionales en el turno de las elecciones nacionales, con lo cual dejó de ser un competidor por la candidatura a la Gobernación. Pero el cargo que lo tocaría a Miranda si se consolida la estrategia del vicegobernador es el que quieren casi todos lo postulados a la gobernación. La pelea principal es con Omar Félix, quien pretende el mismo lugar en la lista de Senadores Nacionales que Ciurca negocia para Miranda. Ninguno de los dos quiere ser candidato a vicegobernador de Bermejo.
En caso de caerse la postulación del ex intendente de Maipú, sea por voluntad propia o por cómo avanzó la negociación de la troika del peronismo local, aparece con chances de ser el candidato del consenso el presidente de la Cámara de Diputados, Jorge Tanús.
Además de Roby, por afuera de la negociación de Mazzón, Ciurca y Félix, se plantó la candidatura del ministro de Transporte, Diego Martínez Palau, que está empujada y financiada por su par nacional, Florencio Randazzo, aspirante a la candidatura presidencial que podría declinar a favor de ir por la gobernación de Buenos Aires. También el kirchnerismo local encabezado por La Cámpora, Guillermo Carmona y Kolina se jugaría a las PASO con fórmula propia.
En el peronismo, ninguno de los estrategas está pensando que las urnas ungirán a un candidato propio en la Provincia, por lo que quien sea designado candidato deberá primero convencer a los propios de sus posibilidades y luego salir a tratar de revertir la tendencia. Pero ni Mazzón ni Ciurca ni Félix creen lógico que vayan más de dos o tres listas del FPV a las Paso, entre las cuales una -la consensuada entre los tres- se destaque sin problemas del resto.