La precipitación de cenizas del Calbuco sigue afectando el Norte de la Patagonia y por efecto del viento las partículas llegaron en concentraciones bajas hasta la Provincia y Ciudad de Buenos Aires. El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) informó que la ceniza residual se desplazó en las últimas horas en dirección Noreste y Este, por lo que afecta a las provincias de Neuquén, Río Negro, oeste de La Pampa y extremo sudeste de Mendoza.
El ministro de Salud de la Nación, Daniel Gollan, aseguró que la situación “está bajo control y sin casos de personas afectadas”.
En Buenos Aires, explicaron los especialistas, “no generarán una reducción significativa de la visibilidad” ya que “la concentración es muy baja”, pero sí pueden provocar que el cielo se vea con “un aspecto brumoso”.
Las localidades más aquejadas continúan siendo Bariloche, Villa La Angostura y San Martín de los Andes donde las clases y la administración pública están suspendidas, algunos comercios como bancos y servicios financieros permanecieron cerrados, y los pobladores que salen a la calle deben hacerlo con barbijos.
Los vuelos desde y hacia la Patagonia y los que cruzan la Cordillera hacia Chile comenzaron a sufrir mayores complicaciones hoy porque la densidad de la ceniza en la altura afecta los motores de las aeronaves.
Por el momento Aerolíneas Argentinas mantiene cancelados los vuelos a Bariloche, Neuquén y Chapelco, mientras que en el resto de los destinos "la operación es normal", informó el presidente de la empresa, Mariano Recalde.
Pese a esto, el jefe de Meteorología del aeropuerto de Bariloche, Martín Fernández, evaluó hoy que “el nivel de concentración de partículas no es tan alto” por lo que mediante el senador Miguel Pichetto comenzó una gestión con el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, para reabrir la terminal aérea.
El jefe de la bancada del Frente para la Victoria también se comunicó con el presidente del Banco Central, Alejandro Vanoli, para “pedirle la reapertura de los bancos y servicios financieros lo antes posible”.
“La situación está bastante bien, el panorama es bueno, está todo controlado”, señaló en sintonía el ministro Gollan luego de sobrevolar ayer la zona entre Esquel y Bariloche.
Subrayó que no se reportaron casos de personas afectadas y apuntó que “la gente está tranquila, asumió bien” la emergencia por el fenómeno natural.
Gollan, que viajó al sur junto a la ministra de Seguridad, Cecilia Rodríguez, llevó a la zona un cargamento de insumos como mascarillas, medicamentos antialérgicos, corticoides, ”para reforzar los recursos sanitarios disponibles”.
"La cantidad de polvillo no es muy grande y es muy liviano, la gente debe quedarse en sus casas y no debe salir muy seguido", puntualizó el ministro.
Gollan remarcó que “esta erupción es muy diferente" a la del Villarica ocurrida en marzo pasado y precisó que la ceniza caída "es un polvo muy finito que contiene silicio y calcio, no es tóxico".
El volcán Calbuco volvió a emitir cenizas esta mañana, con menos intensidad que en días anteriores, lo que podría ser un alerta para un nuevo proceso eruptivo, informaron las autoridades del Servicio Nacional de Geología y Minería (Sernageomin) de Chile.
La entidad informó que el volcán pasó de tener dos cráteres antes de la erupción a seis, producto de las explosiones ocurridas en la madrugada.
Más de 4.150 personas debieron abandonar sus hogares en el país trasandino, que mantiene el "alerta roja" por la acumulación de lava y la precipitación de cenizas.
El gobierno de Michelle Bachelet prohibió el ingreso en un radio de 20 kilómetros al macizo y toda persona que vive en la zona fue evacuada a albergues o a casas de familiares.
Estos evacuados recibieron la autorización hoy para volver temporalmente a sus hogares con la idea que revisen el estado de las viviendas y retiren lo necesario.
El Calbuco entró en erupción por primera vez el miércoles a la tarde tras 43 años de inactividad y en Chile también produjo la suspensión de vuelos y clases.
Fuente: Télam
