Al menos una decena de muertos y 198 heridos causó un ataque suicida en el centro de Kabul, Afganistán, tras el cual tropas afganas e insurgentes se enfrentaron en un tiroteo que aún continúa.
Un atacante suicida hizo detonar este martes un explosivo en una zona de alta seguridad, cerca del Ministerio de Defensa, en la capital afgana, que dejó decenas de muertos y 198 heridos, informó el portavoz del Ministerio de Salud Pública, Aziz Qawosi, según informó la agencia Xinhua.
"Hasta el momento varios cadáveres y 198 personas heridas fueron trasladados al hospital", explicó el funcionario y advirtió que todavía es difícil precisar el número de muertos.
La explosión ocurrió a las 08:55 (01:25, hora en Argentina), en una zona de seguridad en el centro de Kabul, cerca del Ministerio de Defensa y otros edificios gubernamentales, dijo el jefe del Departamento de Emergencias del Ministerio de Interior afgano, Homayoon Aini, citado por EFE.
El objetivo del ataque eran unas oficinas del servicio de inteligencia afgano, el Directorio Nacional de Seguridad de Afganistán (NDS, por sus siglas en inglés), indicó Aini.
Por su parte, el presidente afgano, Ashraf Ghani, confirmó el ataque "terrorista" a través de su cuenta de Twitter y aseguró que el atentado con bomba "muestra claramente la derrota del enemigo en los enfrentamientos cuerpo a cuerpo".
Sin embargo, el portavoz de los talibanes, Zabihullah Mujahid, reivindicó a través de Twitter la autoría del atentado con bomba y reveló que tras la explosión un número indeterminado de insurgentes penetraron en las oficinas de los servicios de inteligencia.
"El tiroteo continúa, hemos impuesto un largo número de bajas al enemigo", sentenció el portavoz de los talibanes.
Este atentado en Kabul ocurre después de que la semana pasada los insurgentes anunciaron el comienzo de la ofensiva de primavera, lo que supone un aumento de sus ataques, a lo que siguió el anuncio del Gobierno afgano de un plan de cinco años para combatir a los insurgentes.